Real Zaragoza

Parón... ¿y cuenta nueva?

El conjunto aragonés afronta lleno de obligaciones el tramo final de una Liga que se le ha complicado muchísimo después de no haber logrado ni una victoria en lo que va de año.

No hay marcha atrás. El Real Zaragoza se juega la Liga -y la vida- en diez jornadas que marcan el devenir de la escuadra en una situación comprometidísima. Es natural, después de que el conjunto aragonés haya acumulado un vertiginoso registro de 11 jornadas consecutivas sin ganar, algo insoportable, por más que el conjunto aragonés no haya caído todavía al descenso.


Precisamente esta circunstancia, junto a los indiscutibles méritos que acumula Manolo Jiménez al frente de la entidad blanquilla, mantienen al técnico sevillano en su sitio, casi en contra -o claramente en contra- de lo que dicta la ley del fútbol. Porque hoy en día resulta casi imposible que un entrenador conserve su puesto después de semejante trayectoria.


El de Arahal, sin embargo, estira su crédito. Al menos, de cara al partido con el Real Madrid.La plantilla se mantiene unida y quiere afrontar como una final -que lo es- el partido ante la escuadra merengue. Ganar es una obligación indiscutibley ya no se mira la talla del rival. Además, La Romareda precisa recuperar su encanto, su embrujo. Y qué mejor oportunidad que frente a una escuadra como la de Mourinho.


Sabe de sobras Manolo Jiménez que el último parón -el de Navidad- no pudo sentarle peor al equipo. Quiere ahora aprovechar otro paréntesis en la Liga para enmendar la situación. Y es, no cabe duda, el momento ideal: afronta los duelos con el Real Madrid y el Barcelona en La Romareda y, sobre todo, los enfrentamientos directos con rivales que se la juegan ante el Real Zaragoza: Deportivo en Riazor, Celta en Balaídos y Mallorca en casa. Ahí es donde está la Liga -y la vida- del equipo aragonés. 


Al zaragocismo no le cabe ninguna duda. Es tiempo de parón... y cuenta nueva.