Real Zaragoza

El año del cambio

El defensa Abraham Minero reconoce la mutación que ha experimentado el equipo, pero insiste en que hay que "seguir trabajando para que cada día sea mejor".

El defensa del Real Zaragoza Abraham Minero ha recordado el gran cambio que ha experimentado el equipo aragonés en un año, cuando entonces estaba hundido en la clasificación y con escasas opciones de permanencia y ahora se encuentran en una posición bastante más tranquila.


"Hace un año la situación era totalmente diferente, pero eso es pasado y ahora tenemos otro presente y tenemos que seguir trabajando para que cada día sea mejor", ha manifestado en su comparecencia en rueda de prensa antes de comenzar el entrenamiento a puerta cerrada en las instalaciones de la Ciudad Deportiva.


Tras las vacaciones navideñas ha reconocido que ya tenía ganas de volver "a trabajar y a la rutina de los entrenamientos y los partidos". "Ahora estamos con la mente puesta en el partido contra el Betis", ha dicho.


El jugador catalán ha insistido en la importancia del partido frente a los béticos porque "es en casa" y quieren "brindar el triunfo a la afición".


Del conjunto que entrena Pepe Mel ha destacado que es un adversario "complicado que tiene una buena plantilla" y para conseguir superarlo deberán tener "máxima concentración y estar preparados" para hacer su juego.


Respecto de las aspiraciones del equipo aragonés, una vez alcanzados los veintidós puntos que señaló el entrenador Manolo Jiménez como objetivo para la primera vuelta, ha comentado que en lo único que se fijan es "en el siguiente rival cada semana".


El vallesano esta temporada se ha consolidado como hombre prácticamente imprescindible para el técnico sevillano, aunque ha afirmado: "Nunca estoy contento porque siempre quiero más y crecer como jugador. No soy conformista y siempre miro para corregirme y mejorar cada día".