Real Zaragoza

El extraño caso de Ndri Romaric

La falta de tono, los problemas físicos y los compromisos internacionales han contribuido a restar jerarquía al jugador de Costa de Marfil en el esquema de juego del Real Zaragoza de Jiménez.

Ndri Romaric
La mano derecha de Jiménez
OLIVER DUCH

Es verdad que la retahíla de futbolistas singulares en la historia zaragocista, más aún, bajo la tutela de Agapito Iglesias, ha sido alargada. A ellos se une esta campaña el marfileño Ndri Romaric, rutilante fichaje de un Real Zaragoza en comprometida situación económica, en torno al cual quiso Manolo Jiménez componer el equipo. Su iniciativa, sin embargo, no ha prosperado, a pesar de la insistencia –contundente insistencia- del técnico sevillano. A estas alturas de la temporada, cuando el Real Zaragoza está a punto de disputar la octava jornada de Liga –la quinta parte del Campeonato-, Romaric llevará a cabo una minipretemporada para intentar adquirir el tono físico que exige la Primera División.


Manolo Jiménez ha diseñado el Real Zaragoza de esta campaña en torno a dos piezas básicas, Apoño y Romaric. Que se incorporan a un esqueleto del que ya forman parte otras columnas, como Roberto o Postiga; y en el que se ensamblan también Álvaro, Sapunaru, José Mari, Montañés, Víctor…


Pero su apuesta –fuerte- no ha funcionado, sobre todo en el caso del futbolista africano. Romaric apenas ha aportado al equipo, ha sumado muy poquito y ha abierto boquetes en la medular blanquilla. Su desaparición ante el Getafe –muy bien tapada por Movilla-, apenas dejó huella en la formación blanquilla, a pesar de jugar con un hombre menos.


Romaric está fuera de forma y le cuesta aún más adquirir el tono por sus problemas físicos. Acelera ahora Jiménez su puesta a punto. Pero, ¿hasta cuándo?


Porque el jugador zaragocista acaba de lograr con su selección, Costa de Marfil, la clasificación para la Copa de África, que está previsto que se celebre entre el 19 de enero y el 10 de febrero. En el caso, muy probable, de que Romaric sea convocado con la selección que lidera Drogba, se perderá el comienzo de año.


Entre la falta de forma, los problemas físicos y los compromisos internacionales, Romaric pierde peso en el esquema de juego del Real Zaragoza, a pesar de que Manolo Jiménez confía en recuperar al desequilibrante futbolista que marca diferencias, que aporta el plus de calidad que precisa el equipo.


Todo el mundo es consciente de las garantías que ofrece el costamarfileño cuando se encuentra en el nivel físico que exige la Primera División. Que es lo que quiere encontrar Manolo Jiménez. Hasta ahora, el problema ha sido su escasa aportación, una siembra de dudas en lugar de las esperadas certezas.


Hasta que Romaric aparezca, el sorprendente Movilla tomará sus galones. Su llegada, con el mercado cerrado y sin pretemporada, es precisamente la otra cara de la moneda –la cara amable- de este extraño caso Romaric.