Segunda B

El Zaragoza B cae en Sestao

El filial suma su tercera derrota consecutiva tras caer por 2-0 frente al Sestao River con dos goles antes del descanso.

El Zaragoza B no levanta cabeza. Los aragoneses sumaron la tercera derrota consecutiva que enciende la señal de alarma. Frente al Sestao River ofrecieron una pobre imagen en la que en ningún momento supieron responder a la superioridad vasca. Antes del descanso, el enfrentamiento ya estaba sentenciado con los goles de los locales Solabarrieta y Josu. La segunda parte fue de puro trámite.


Los verdinegros dominaron desde el principio ante un rival que se defendió con orden pero en ataque se mantuvo nulo por completo. Su preocupación fue más en tareas defensivas que no de construcción de juego ofensivo. Así se fueron sucediendo las opciones de gol para los locales. Antes de la primera media hora llegó el premio al mejor juego vasco. Una falta colgada en el área fue rechazada por Alcolea pero Solabarrieta, atento a la jugada, recogió el balón dentro del área para engatillar un disparo imparable para el guardameta del filial.


Y antes del descanso, cuando el colegiado iba a señalar el final del primer periodo, llegó el segundo tanto del Sestao River. Josu, de tiro cruzado, dejó el balón fuera del alcance del meta Alcolea que dejaba al Zaragoza B muy tocado para afrontar la segunda mitad. Los errores habían pasado factura al cuadro de Álex Monserrate.


Tras el paso por los vestuarios, el técnico del filial aragonés realizó dos cambios con el objetivo de modificar la dinámica del juego de su equipo y, sobre todo, tener opciones de arrancar un mejor resultado de Las Llanas. Y lo cierto es que su equipo cambió por completo de imagen y en los primeros quince minutos dispuso de dos buenas oportunidades, protagonizadas por Jorge Ortí, para incluso empatar el enfrentamiento. Sin embargo, Montero en dos intervenciones prodigiosas evitó que el Zaragoza B pudiera meterse en del partido.


No desfallecieron los jugadores zaragocistas ya que lo siguieron intentando ante un Sestao River que, con su cómoda ventaja en el marcador, se dedicó a conservar su renta y a no pasar apuros a base de fortalecer el centro del campo y con mucha seriedad defensiva.


Los últimos minutos fueron un querer y no poder del Zaragoza B que se estelló una y otra vez ante la defensa vizcaína. Su portero, Montero, no pasó excesivos apuros pese a que en los instantes finales del duelo el conjunto aragonés apretó mucho e incluso dispuso de varias opciones para cambiar el resultado final.


A la conclusión del partido, decepción en las filas zaragocistas y en su entrenador Álex Monserrate que comentó en rueda de prensa que todavía "queda mucho trabajo por realizar para cambiar la dinámica negativa que tenemos" aunque confía en "mejorar en las próximas jornadas".