Real Zaragoza

Obradovic, Da Silva y Barrera, los últimos en llegar

Los tres futbolistas no participaron en la sesión programada el jueves por la tarde. Dujmovic, Pintér y Postiga realizaron recuperación tras haber jugado con sus selecciones.

Entrenamiento del Real Zaragoza
El Zaragoza aún confía en la salvación
ASIER ALCORTA

Poco a poco, el Real Zaragoza va recuperando efectivos. Como un goteo constante, los jugadores internacionales van incorporándose a la rutina del equipo de cara al próximo partido frente al Villarreal. Como es lógico y normal, los primeros en arribar han sido los que han disputado sus partidos en suelo europeo. Así, Micael, Postiga, Pintér y Dujmovic, este con el entrenamiento ya empezado, consiguieron personarse en la Ciudad Deportiva este jueves a las 17.00.


Con solo unos cuatro minutos de retraso, la plantilla comenzó a ejercitarse sobre el verde del campo principal. Aunque, como ocurriera en sesiones anteriores, Jiménez no pudo contar con todos sus efectivos. Da Silva, Barrera y Obradovic no pudieron llegar a tiempo. Los dos americanos, que son los futbolistas que más kilómetros han debido recorrer, disputaron sus encuentros, según el horario español, en la madrugada del miércoles por lo que, además del cansancio propio del partido, deberán lidiar con los cambios de hora. El serbio, que jugó casi todo el encuentro que enfrentó a su selección con Chipre, fue sustituido en el descuento, no debería tener mayor problema.


A lo largo de sus ocho partidos entrenando al Real Zaragoza, Manolo Jiménez solo ha mantenido inamovibles a dos futbolistas en todos sus onces iniciales. Roberto y Da Silva. El paraguayo, capitán del combinado guaraní, jugó todo el choque que los albirrojos celebraron ante Panamá, con victoria por 1-0. Por ello, su continuidad en el eje de la zaga podría peligrar tras el viaje transoceánico.

Trabajo de recuperación


De los que llegaron para la práctica, solo Rúben Micael trabajó al lado de sus compañeros. El centrocampista luso no disputó ningún minuto en el empate a cero entre Portugal y Polonia, por lo que no se sometió a la clásica recuperación que si tuvo, por ejemplo, su compatriota Héleder Postiga. Adam Pintér y Dujmovic, que protagonizó la anécdota al llegar con el tiempo justo, también se ejercitaron al margen.


Debido a las numerosas bajas, la sesión preparada por Jiménez se basó en aspectos generales. Algunos lanzamientos a puerta y, sobre todo, una serie de partidos con seis futbolistas por bando y en espacio reducido. Esta rutina se ha convertido en una práctica habitual en los entrenamientos diseñados por el sevillano, especialmente en aquellos en los que busca no imprimir una gran carga física a sus pupilos.


La agenda del club establece dos sesiones más antes del partido ante el Villarreal, el domingo a las 12.00. Así, hoy, el equipo volverá al trabajo en las instalaciones de Cuarte de Huelva. Mañana, a las 11.00 también, el grupo lo hará en La Romareda, esta vez a puerta cerrada. Será el momento de ultimar la táctica a desarrollar. Esa con la que intentar sorprender al rival demostrando que, al menos moralmente, el equipo no se encuentra en desahucio.