REAL ZARAGOZA

... Y Zapater pasó por el gimnasio después de su rueda de prensa

El capitán, con molestias físicas, fue tratado por los recuperadores antes de terminar la mañana sobre el césped.

Zapater, al abandonar la sala de prensa antes del entrenamiento de este jueves.
Zapater, al abandonar la sala de prensa antes del entrenamiento de este jueves.
Toni Galán

En el entrenamiento del jueves, la principal novedad en el Real Zaragoza fue la ausencia de Alberto Zapater, su capitán, entre los componentes de la plantilla que comenzaron a ejercitarse bajo la pauta de Fran Escribá en la Ciudad Deportiva. El ejeano, que había atendido a la prensa minutos antes para abordar las cuestiones relativas a la crisis que afecta al equipo tras las dos goleadas seguidas encajadas ante Alavés y Málaga, sorprendió al no formar parte del grupo inicialmente en una fecha ya avanzada de la semana, con la visita del Burgos a La Romareda en ciernes, el domingo en la sobremesa, a las 16.15. 

Zapater se fue al gimnasio y allí fue tratado específicamente por los recuperadores. Molestias físicas sin especificar aconsejan su parcelación de las rutinas generales. El cincovillés viene de no disputar ni un solo minuto el lunes en La Rosaleda, en el batacazo frente al Málaga con ese 3-0 adverso que ha encendido todas las alarmas y ha elevado la temperatura del medio ambiente zaragocista cerca de la ebullición. Tras las duras declaraciones de Escribá al término de ese duelo en campo andaluz, Zapater es uno de los que apuntan a regresar a su puesto en el once inicial contra los burgaleses y, a poco más de 72 horas para el siguiente envite del cuadro aragonés, está siendo regulado para que su estado físico pueda aproximarse al cien por cien. 

El capitán compartió durante un tiempo espacio esta mañana con los lesionados Azón y Quinteros. Quien sí se reincorporó al trabajo sobre el césped, después de varios días ausente por un dolor en un pie, fue el portero suplente Álvaro Ratón. En cualquier caso, asunto menor a priori ante lo que se avecina en adelante.

Si en Málaga Escribá ejecutó una revolución de las suyas, cambiando el sistema táctico y dejando medio equipo del día anterior ante el Alavés en el banquillo tras el 1-4 que costó digerir, este fin de semana próximo parece avecinarse otra del mismo calado, retornando al punto de partida en muchos de los casos.

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