real zaragoza-huesca
El análisis del derbi aragonés, línea por línea
Fran Escribá y José Ángel ‘Cuco’ Ziganda ultiman la preparación del partido con el grueso del planteamiento decidido, pero pequeños detalles por pulir.
Que nadie espere grandes sorpresas en las formaciones de Real Zaragoza y SD Huesca en el derbi territorial de este sábado (La Romareda, 21.00). Fran Escribá y José Ángel ‘Cuco’ Ziganda ultiman la preparación del partido con el grueso del planteamiento decidido, pero pequeños detalles por pulir. Ambos técnicos asumen bajas importantes -Cristian Álvarez e Iván Azón por el lado zaragocista, y Marc Mateu y Juan Carlos Real por el oscense- y algunas dudas de última hora, pero no tendrán problemas para presentar un once reconocible.
El gran dilema en ambos equipos se presenta en la delantera. El Zaragoza espera que Simeone supere sus molestias musculares y, si finalmente puede ser de la partida, Escribá deberá decidir si es acompañado por Mollejo o Gueye. En el Huesca, debido a la citada ausencia de Juan Carlos, Ziganda tendrá que decidir quién entra en su lugar.
Además, las zonas traseras de ambos conjuntos también ofrecen alternativas. Francés o Lluís López es la disyuntiva de Escribá; mientras Ziganda confía en que su capitán, Pulido, no tenga problemas para jugar con una férula que lo proteja de la fractura que el pasado miércoles, ante el Andorra, se produjo en el tabique nasal.
REAL ZARAGOZA
Con Cristian Álvarez lesionado, el puesto de guardameta es el que más dudas genera en el Real Zaragoza. Álvaro Ratón, su sustituto natural y quien salvo sorpresa formará bajo palos en el derbi, no acaba de mostrarse seguro. Su problema, más que en los goles encajados, está en la inseguridad que despierta. Fue pitado contra el Ibiza, en La Romareda, y sus nervios se trasladaron al último duelo ante el Albacete.
La llegada de Fran Escribá ha promovido continuos cambios en la línea trasera. El técnico valenciano confió en la misma defensa en sus dos primeros encuentros (Fran Gámez, Lluís López, Jair y Fuentes); pero después fue dando entrada a Nieto, Larrazabal y Francés, que con él ha dejado de ser titular indiscutible. Ahí, en si el canterano forma mañana junto a Jair, reside una de las principales dudas sobre la alineación de mañana.
Escribá dejó atrás el 4-2-3-1 de Carcedo para empezar a jugar en un clásico 4-4-2 con doble pivote. Esto ha reducido la presencia de centrocampistas interiores y ha alterado el rol de varios jugadores. Zapater ha incrementado su protagonismo en detrimento de Manu Molina; Eugeni y Francho han sido desplazados a la banda en algunas fases, como en Albacete; Mollejo ha adelantado su posición… El equipo busca llegar arriba en menos toques, pero sigue acusando falta de chispa en los últimos metros. Bermejo, que llega entre algodones al choque, es de los pocos que la aporta.
El cambio de sistema implantado por Escribá, ese paso al 4-4-2, ha incrementado la pujanza ofensiva. Giuliano Simeone, que es duda para el partido ante el Huesca por una sobrecarga muscular, se siente cómodo con otro punta al lado, y el Real Zaragoza pisa área y genera más ocasiones. Falta concretarlas. Falta que los delanteros empiecen a ver portería. Especialmente, Pape Gueye, que llegó como ‘9’ de referencia y sigue sin estrenar su cuenta anotadora. Iván Azón, por su parte, seguirá una semana más al margen.
SD Huesca
Que el Huesca sea el cuarto equipo menos goleado de la tabla y que haya mantenido la portería a cero en 11 de las 19 jornadas se explica en parte por el excelente desempeño de Andrés Fernández bajo los palos, que un curso más está mostrando que la categoría de plata se le queda pequeña. Indiscutible para Cuco Ziganda y salvador en varios compromisos en los que ha impedido que los puntos se fuesen por el desagüe, es quizá el futbolista más determinante del equipo.
El técnico acoraza el equipo con una línea de cuatro que viró a tres centrales durante el pasado partido ante el Andorra y dio buen resultado. Con la base de la temporada pasada, Andrei Ratiu y Florian Miguel siguen siendo los laterales y el rumano ha experimentado una madurez notable de un curso a otro. Jorge Pulido podrá jugar con una férula después de romperse el tabique nasal y su acompañante será probablemente el otro Pulido, Rubén, que se ha mostrado irregular.
El doble pivote es innegociable para Ziganda y en él ha encontrado su mejor versión Cristian Salvador tras una difícil temporada anterior. Un centrocampista que barre y pesca balones y al que acompaña el japonés Kento Hashimoto con un físico superlativo. A falta de más fútbol creativo, el ataque comienza por las bandas y se espera a Gerard Valentín en la derecha para marcar diferencias y tras cumplir partido de sanción y a Joaquín por el lesionado Marc Mateu, baja sensible, en la izquierda.
La ausencia del máximo anotador del Huesca, Juan Carlos Real (cuatro goles), se compensa con la puesta a punto de Carrillo, el ‘nueve’ gigantón que mejor entiende lo que Ziganda demanda de sus delanteros y apunta a titular en La Romareda. A falta de un jugador que marque diferencias en el área rival, el Huesca se aferra a la segunda línea. Aunque poco, casi todos los atacante han visto portería y nueve futbolistas se reparten las 16 dianas que se han marcado en 19 encuentros.
