La recuperación de Azón "va para un poco más de tiempo del previsto", dice Carcedo

La rodilla de Azón es ya un mantra durante este final del verano de 2022 en el zaragocismo. La lesión que ha apartado al delantero centro del Real Zaragoza del inicio de temporada, justo cuando su concurso era más decisivo ante la ausencia de más delanteros en la incompleta plantilla y por la necesidad de sus goles, ha ido alargándose como un chicle en lo referente al tiempo de duración de su recuperación. Este jueves, por segunda semana consecutiva, el entrenador Juan Carlos Carcedo actualizó la situación del ariete aragonés en la enfermería. 

“Lo de Azón va para un poco más largo tiempo del que pensábamos. Igual en un momento dado creíamos que podía estar apto para jugar antes, pero creo que se va a alargar un poco más”, anticipó el técnico. Carcedo volvió a hablar de que todo está enmarcado en los plazos establecidos para su rehabilitación y se refirió a la resonancia magnética nuclear que pasó el jugador a principios de semana con buen diagnóstico, pues no se detectan inconvenientes nuevos. 

Pero, por primera vez, Carcedo nombró el síntoma que genera más recelo en términos médicos en este traumatismo en el cóndilo femoral que sufre Azón desde el 6 de agosto, antes de viajar a Gerona para afrontar el último amistoso de pretemporada, que ya se perdió: un edema óseo en la zona afectada de la articulación.

“Vamos a tener tranquilidad con él, que se recupere bien. Tiene un pequeño edema en la rodilla, que hace que los plazos vayan a ser un poco más lentos. Entoces, calma. De momento, no va a estar”, indicó el riojano con cierto tono de resignación. 

El '9' blanquillo acumula ya 21 días sin entrenarse con el equipo, sin practicar fútbol. Su tono físico es mantenido únicamente a base de gimnasio, pero sin poder cargar las piernas de esfuerzos para no dañar la rodilla, en la que el rozamiento entre dos huesos ha sido causa de dolor y de imposibilidad de llevar a cabo la flexión correcta de la misma al correr o golpear la pelota. 

Por ahora, el tratamiento conservador está prolongando la convalecencia de Azón. No jugó en Las Palmas, donde aún se hablaba de "duda" sobre su concurso en los días previos, algo que se repitió  al inicio de la semana pasada respecto del choque ante el Levante. Ahora, antes de ir a Cartagena, ya se sabía desde el lunes que era imposible que llegase, como tampoco estará ante el Lugo el próximo domingo, 4 de septiembre. A partir de ahí, este tipo de dolencias son imprevisibles. Ha habido casos de recuperaciones súbitas y otros de largos meses de baja.