Simeone y Mollejo, fichajes en puertas de la titularidad en el Real Zaragoza

Giuliano Simeone y Víctor Mollejo, dos de los cuatro fichajes del Real Zaragoza en los dos meses y 23 días de mercado de verano transcurridos, están en puertas de su primera titularidad en el once de Juan Carlos Carcedo, el nuevo entrenador zaragocista para esta temporada. Suplentes en las dos primeras jornadas de liga, en Las Palmas y frente al Levante, los dos jóvenes puntas que han llegado dedidos del Atlético de Madrid para remodelar en la medida de lo posible la defectuosa línea delantera de los dos últimos años, tienen opciones de entrar desde el inicio este viernes en Cartagena, partido ya de la jornada 3 del torneo liguero.

Simeone, en los dos ratos en los que Carcedo le ha dado la venia para debutar como profesional en Segunda División (viene del filial rojiblanco con 19 años, de TerceraRFEF, la quinta categoría del fútbol español), ha demostrado velocidad, verticalidad y llegada a la portería rival, aunque no ha podido concluir con gol las oportunidades de las que gozó. Una, individual en Las Palmas, se la sacó el portero Valles. Otras dos, ante el Levante en La Romareda, acabaron con un disparo alto por poco y con un mal pase, precipitado, en un contragolpe en superioridad sobre la defensa valenciana (en el que debió asistir a Mollejo, precisamente, y decidió erradamente combinar con Puche, dándosela al portero Cárdenas). En Canarias jugó solo 10 minutos y el aumento, como extremo izquierdo, su posición preferida. Frente a los levantinistas, relevó en el puesto de delantero centro a Narváez para ser el ‘9’ durante los últimos 28 minutos y la prolongación.

Simeone, en uno y otro caso, en posiciones diferentes, dejó buenas sensaciones y aportó veneno. Mejoró a Narváez, el habitual titular como referencia ofensiva en ausencia del lesionado Azón y a la espera de que lleguen los fichajes esperados para completar una vanguardia escasa.

Por su parte, Mollejo, de 21 años, es por ahora –en el reducido elenco de refuerzos– uno de los que viene con galones tras su paso el año pasado por el Tenerife (jugó la promoción de ascenso), el anterior por el Getafe, de Primera División, y el Mallorca (ascendió), y hace tres campañas por el Deportivo de La Coruña (con el que descendió a Segunda B siendo un crío de 18 años). Extremo por ambas bandas, su efervescencia y casta es uno de los valores que llamaron la atención de Carcedo para su sistema de presión alta y robo inmediato tras la pérdida del balón.

El manchego debutó en Las Palmas supliendo a Puche –sorpresa del técnico ese día– a falta de 26 minutos y el tiempo añadido. Y hace tres días en La Romareda fue el relevo del desdibujado Bermejo en el minuto 55, participando así en 35 minutos y el aumento contra el Levante. En ambos casos ocupó la banda derecha del ataque. En su caso, su aportación fue más colectiva que individual, con su rasmia habitual como bandera y acompañando, sin participar, un par de contragolpes rápidos.

Un giro de tuerca

Las primeras apuestas ofensivas del nuevo técnico en las dos primeras jornadas no han dado resultado en forma de goles. Narváez apenas se ha mostrado y sigue inédito en esas lides desde hace 10 meses, pretemporada incluida. Bermejo, Puche y Vada, los titulares por los flancos del ataque estos días, tampoco han estado finos ni activos. Sin el lastimado Azón, en Cartagena asoma la oportunidad para que Carcedo mueva el árbol en busca de revulsivos para no quedarse por tercera jornada consecutiva sin ver portería.

Y Simeone y Mollejo, dos caras nuevas traídas por Torrecilla para potenciar la línea delantera, piden su turno a un cuerpo técnico que lo contempla como factible en el estadio de Cartagonova. Simeone marcó su primer gol como zaragocista en Málaga, el 2-2 final ante el Betis de Primera. Mollejo, menos anotador, todavía no ha cantado su primera diana. En Cartagena, quizá no sea solo Molina el único fichaje nuevo titular.