El nuevo portero del Real Zaragoza, Daniel Rebollo llegado del Betis B a principios de julio, comenzará la temporada como guardameta del RZD Aragón en Segunda RFEF. El guardameta, de 21 años, ya fue inscrito a su llegada con dorsal del equipo dependiente, el 35, de modo que pueda estar a caballo entre las dos plantillas y pueda ser utilizado por Juan Carlos Carcedo en el primer equipo cuando lo considere necesario, pero contando con minutos de juego y dinámica de competición permanente en las filas del B.

Rebollo, que llegó al Zaragoza en un rebote súbito tras rechazar el club aragonés el fichaje de Gaizka Campos, portero vizcaíno del Celta B al descubrir un tuit ofensivo contra el club zaragocista escrito por este cuando tenía 13 años en Twitter, ha completado toda la pretemporada a las órdenes de Carcedo –con buenas sensaciones– y viajó incluso a Las Palmas el fin de semana como tercer arquero. Pero ya debutó con el filial en Cuarte en un amistoso el pasado miércoles.

La permanencia de Álvaro Ratón en la plantilla, como suplente del titular Cristian Álvarez, aconseja que Rebollo no se quede ahogado en la vieja y cada vez más inusual figura de tercer portero de la plantilla profesional zaragocista. 

La singularidad del caso Carbonell

Por su parte, Luis Carbonell, delantero de 19 años que el año pasado estuvo cedido en el juvenil del Real Madrid y que tiene cuatro años de contrato firmados como profesional, tiene marcado su futuro en otro club, en principio a modo de cesión. Carcedo no ha contado con el durante el verano, con la excepción de la primera semana en la Ciudad Deportiva y la breve y suspendida concentración en Boltaña (Huesca), y no se desea que juegue en el Aragón, en Segunda RFEF. 

Ahora, es perentorio resolver su destino por parte del área deportiva que encabeza Miguel Torrecilla, que está escrutando el mercado en pos de que Carbonell pueda disponer de un espacio donde reivindicarse en Primera RFEF.