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Ningún positivo en covid en el Real Zaragoza a la vuelta de vacaciones
La plantilla ha entrenado al completo, de forma individualizada por el protocolo ordenado por La Liga, tras pasar los test de antígenos sin incidencias. Hasta mañana no se corroborará la situación con los resultados de las PCR.
Ningún jugador de la plantilla profesional del Real Zaragoza ha dado positivo en los primeros test de antígenos que han debido pasar obligatoriamente en la mañana de este lunes, justo antes del primer entrenamiento posterior a la semana de vacaciones de Navidad que han disfrutado desde el pasado día 19. La sesión, que ha sido a puerta cerrada, ha sido, eso sí, anómala y fuera de las rutinas de la normalidad, dado que La Liga (LFP) ha reactivado de nuevo todos los protocolos de prevención de contagios de covid-19 que ya rigieron en la fase más aguda de la pandemia, muchos meses atrás.
El club informa de que en la sesión preparatoria han participado todos los futbolistas, junto a todos los miembros del cuerpo técnico y auxiliares, sin excepción alguna. Ahora bien, es necesario esperar 24 horas para poder asegurar que la plantilla zaragocista está sin ningún infectado por coronavirus, dado que además del test de antígenos, el doctor Ireneo de los Mártires, jefe de los servicios médicos del club, ha tomado muestras para llevar a cabo las PCR (siglas, en inglés, de Reacción en Cadena de Polimerasa), prueba de diagnóstico rotundamente fiel en enfermedades infecciosas que necesita de ese tiempo para conocer los resultados de cada individuo.
Por ello, según las normas protocolarias de La Liga, los miembros del plantel zaragocista no han podido entrenarse juntos, ha sido imposible acometer ejercicios técnico-tácticos basados en fútbol, con balón, porterías y acciones colectivas. Ha sido un lunes de trabajo físico individual, por calles, sin contacto directo entre nadie del grupo (método que ya se aplicó al principio de la pandemia muchas semanas).
Los futbolistas han acudido a la Ciudad Deportiva sobre las 9.30, cada uno en su coche particular (que deberá ser siempre el mismo en adelante), ya cambiados con la ropa deportiva desde sus casas, adonde han vuelto asimismo para ducharse. No se pueden utilizar los vestuarios de los campos de entrenamiento, se debe evitar la cercanía en espacios cerrados. Obviamente, la plantilla deja de comer junta, en el restaurante de la Ciudad Deportiva, hasta nueva orden.
En el discurrir de cada uno por los aledaños del campo de entrenamiento, es inexcusable llevar puesta siempre la mascarilla, el modelo FFP2. Solo se podrá retirar la misma cuando se salga al césped a llevar a cabo el ejercicio físico o técnico (cuando sea posible).
Por lo tanto, Juan Ignacio Martínez 'Jim', el entrenador blanquillo, ha visto alterado por completo su plan de trabajo de cara a la preparación del próximo partido, el que dará inicio a la segunda vuelta de la liga, el domingo en Miranda de Ebro (Burgos) ante el CD Mirandés en el estadio de Anduva. No es posible preparar simulacros de situaciones reales de juego, movimientos tácticos específicos o cualquier otra estrategia para ejecutar en el partido.
El fútbol, juego colectivo y de infinidad de interacciones sobre el césped, se ve totalmente adulterado en sus entrenamientos con estas medidas sanitarias que se antojan necesarias por razones sanitarias en tiempos de rebrote de la pandemia de covid. La sensación en el seno del grupo futbolístico del Real Zaragoza era esta mañana de lunes de incertidumbre, de ligera desorientación al tener la certeza de que se ha regresado a una situación que se dio hace año y medio y que parecía ya desterrada. La normalidad con la que se ha desarrollado la primera vuelta, con el público en las gradas desde agosto y con los entrenamientos prácticamente asimilables a lo que ocurría antes de que surgiera en el mundo esta enfermedad infecciosa en febrero de 2020, ha saltado por los aires.
