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Vuckic, con su salida del Real Zaragoza encarada hacia el Rijeka de Croacia

El delantero del Real Zaragoza apura sus últimas horas en el club aragonés, sin entrenarse desde hace una semana por un dolor en la espalda. En la entidad blanquilla confían en cerrar su marcha enseguida.

Haris Vuckic, en un entrenamiento del Real Zaragoza en la Ciudad Deportiva.
Haris Vuckic, en un entrenamiento del Real Zaragoza en la Ciudad Deportiva.
Toni Galán

Haris Vuckic, el delantero internacional esloveno del Real Zaragoza, está cerca de abandonar el equipo aragonés, tal y como es el deseo de la entidad, hecho que el jugador conoce desde el 1 de junio en boca del director deportivo, Miguel Torrecilla. En las últimas horas, después de semanas de negociaciones a diversas bandas y con equipos de diferentes países, es el Rijeka de Croacia el que se ha posicionado como mejor destino del punta zaragocista, sin descartarse en ningún caso otras opciones aún abiertas.

Después de unas densas conversaciones mantenidas durante semanas tanto con el jugador como con sus representantes, la disyuntiva quedó servida principalmente entre un destino en Holanda -Paises Bajos-, de donde lo trajo el Real Zaragoza el año pasado de la mano del anterior director deportivo, Lalo Arantegui (lo fichó del Twente Enschede), y el referido de la liga croata, el histórico Rijeka. El proceso ha avanzado en positivo en sus últimos pasos y, en las últimas horas de este martes, todas las partes eran optimistas respecto de encontrar la fórmula para que Vuckic se marche a su nuevo club. 

El Real Zaragoza se vio obligado al término de la liga pasada a comunicar a dos jugadores que era necesaria su salida por motivos económicos, algo que también se sustentaba en su deficiente rendimento en el curso precedente: tanto Vuckic como Larrazabal. Si ya el año anterior ambos estaban incluidos en el vagón de los futbolistas más caros de la plantilla, sus sueldos, por contrato, experimentan un aumento de cara a esta temporada, que es la segunda de los dos en las filas zaragocistas. 

Entre ambos, en números redondos, absorben alrededor de un millón de euros. Vuckic, de quedarse en el Real Zaragoza, cobraría este año en torno a los 600.000 euros, algo inasumible en una economía abollada por las obligaciones pretéritas y por el nuevo estatus de la liga española tras la pandemia de covid. Solo si Vuckic hubiese hecho el año pasado una temporada notable o sobresaliente su fichaje hubiera sido rentable para el club semejante apuesta. Es de perogrullo. Pero ocurrió todo lo contrario. No marcó un solo gol en todo el curso, su participación fue extinguiendose con el paso del torneo hasta ser insignificante y no contó para ninguno de los tres entrenadores que hubo en el equipo: Baraja, Iván Martínez y Jim, el actual, que continúa. 

De cuajar definitivamente esta operación, el Real Zaragoza habrá aliviado en buena medida sus problemas de caja y tendrá una mayor cintura para moverse en el mercado de contrataciones. Por ello, se confía en cerrar este acuerdo cuanto antes para evitar sorpresas desagradables de última hora.

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