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El Real Zaragoza solicita ampliar el pago del convenio de acreedores hasta 2030
El club quiere ajustar esta obligación a la presente situación económica de la sociedad anónima deportiva. Reclama cinco años más de esperas.
El Real Zaragoza ha presentado ante el juzgado de lo Mercantil número 2 de Zaragoza la solicitud de ampliación del plazo de pago del convenio de acreedores, para llevarlo hasta 2030; es decir, pide cinco años más de esperas.
La nueva y reciente normativa legal aprobada por el Gobierno en esta materia, en procesos concursales, a raíz de la covid ha permitido a la sociedad anónima deportiva aragonesa plantear esta medida de ampliación de plazos, sin que cambien las cantidades adeudas a los acreedores.
Será, en todo caso, la titular del juzgado de lo Mercantil número 2 de la capital aragonesa, Maria del Carmen Villellas , la que dé, o no, su aprobación a la reciente petición presentada por el club aragonés.
A partir de aquí, y siempre que sea en caso favorable, el Real Zaragoza dispondrá de dos meses para convocar una nueva asamblea de acreedores ordinarios, quienes, en su mayoría (más del 50%), tendrán que aprobar la referida propuesta de ampliación de plazos.
En el seno del club se confía en que esta medida pueda salir adelante, para lo que se presume fundamental que presten su aprobación acreedores ordinarios como la Liga de Fútbol Profesional (LFP), que preside Javier Tebas, y alguna significada agencia de representación de futbolistas, en la que tiene peso específico la voz de José Antonio Martín Otín, conocido en el mundo futbolístico como Petón.
También figura como acreedor ordinario relevante el Shakhtar Donetsk, a causa del denominado caso Matuzalem, si bien el club ucrariano, a través de sus representantes legales, casi siempre se ha mostrado contrario a los planes del Real Zaragoza en el proceso concursal.
El Shakhtar ya fue contrario a los planteamientos de las primeras quietas y esperas, todavía cuando Agapito Iglesias era el accionista mayoritario de la entidad deportiva aragonesa.
Según fuentes del Real Zaragoza, la idea básica en este sentido es actualizar el convenio de acreedores, para ajustarlo a las condiciones económicas presentes del club, en Segunda División.
De los 4 millones –en términos redondos– que paga el Real Zaragoza a los acreedores ordinarios anualmente, se pasaría a satisfacer 2,2, con final de estos pagos en 2030 y no en 2025, como rige en este momento.
En la solicitud de modificación del convenio de acreedores que se acaba de presentar ante el juzgado, el Real Zaragoza también pide una carencia de cinco años en el caso de que la presente temporada concluya con un desastre deportivo y dé con el equipo en Segunda B; o sea, fuera de las categorías del fútbol profesional.
Para algo más adelante queda una hipotética renegociación con Hacienda del convenio singular, otra de las obligaciones graves que condicionan el presupuesto ordinario de la SAD.
