real zaragoza

Los postes, esos errores maquillados de remate, pudieron ser hasta 10 puntos más

El Real Zaragoza, en una vertiente contundente de su falta de gol y deficiente capacidad ofensiva, ha rematado en la mitad de la liga hasta 11 veces a los palos. En Albacete, con 4 lanzamientos a los postes, batió un récord.

Adrián González acaba de cabecear al poste en la recta final del partido del Real Zaragoza en Albacete el pasado viernes.
Adrián González acaba de cabecear al poste en la recta final del partido del Real Zaragoza en Albacete el pasado viernes.
J.M. Moreno/LOF

El Albacete-Real Zaragoza del viernes, 22 de enero de 2021, partido de la 22ª jornada de Segunda División, está ya en el apartado de los récords del club aragonés. Es evidente que lo que más fuego y focos de atención ha suscitado en las horas primeras tras su conclusión es la pésima y perniciosa actuación arbitral, la del catalán Ávalos Barrera, que con un penalti inventado facilitó el triunfo albaceteño por 1-0 (también hubo otros perjuicios graves, entre ellos, una expulsión perdonada en el minuto 41 al local Azamoum). Pero lo singular, lo atípico y sin precedentes, es que el Real Zaragoza acabase el partido estrellando cuatro remates en los postes de la portería manchega

No es algo normal, ni habitual. Es una cifra exagerada en este apartado de la estadística de los partidos de fútbol. Una barbaridad, si se quiere ver así. Y, además, los zaragocistas lo hicieron -para que aún resultara más doloroso el efecto de la incapacidad para marcar un solo gol que evitase la derrota- en un breve espacio temporal, el que unió los minutos 83 y 93, es decir, en los 10 minutos finales.  

El disparo al poste tiene, desde tiempos ancestrales, una equivocada lectura popular, incluso en el ámbito periodístico a veces, que lleva a la confusión por defecto. Es un error en las narraciones o las crónicas decir que "el poste se interpuso en el remate de X y evitó el gol". Los postes no se mueven. No se interponen a nada

"El 'equipo X' vio cómo los postes evitaban hasta en dos ocasiones sendos goles cantados". Otro error. Los postes no evitan ningún gol. No se desplazan. Están quietos. "Fulano se topó con el poste y su remate acabó no entrando". No es así. Fulano falló, no remató bien, le dio al palo y por eso no fue gol. Porque para que sea gol hay que meter la pelota dentro del portal, no reventarla contra la guarnición que la circunda. 

Aclarado y recordado este error de apreciación y valoración, que viene en los manuales de narración y descripción del fútbol (y otros deportes con porterías), cabe rememorar aquel consejo del viejo entrenador a sus delanteros cuando presumían en la caseta de lo bien que habían estado tiradas dos faltas que habían ido a golpear "en la misma escuadra". El técnico les dijo que se trataba de "dos golpes francos tirados mal, con el mismo valor que si el balón hubiera ido al banderín de córner", o sea, "nulo". Tirar al poste no sirve de nada. Es un marro del lanzador. Hay que introducir el balón detrás de la raya de gol. Eso es lo único que sirve y cubica. 

De este modo, cabe colegir que un remate al poste es la manera más cercana al gol que existe de cometer un fallo. Éste no se consuma por pocos centímetros. A partir de ahí, según se aleje la pelota del marco en su salida fuera, se agrandará el error de puntería. Pero, en definitiva, a efectos de balance final de efectividad goleadora en un partido, da igual rematar a la fila 35 de la Tribuna de Fondo (como hizo en Albacete Eguaras, por ejemplo) que pegarle de lleno a uno de los tres postes, como ocurrió con los remates de Iván Azón (minuto 83), Adrián González (min. 85), Alegría (min. 86) y Narváez (min. 93) en el estadio Carlos Belmonte. El resultado del ataque del equipo en cuestión, la sustancia extraída, es la misma: ninguna, nada de nada, cero goles. 

Hasta 10 puntos han podido volar en los 11 remates a los palos 

En 22 jornadas, en la mitad de la liga, con estos 4 balones llevados a los palos de la portería del Albacete, el Real Zaragoza ha rematado ya 11 veces a los postes. Y, salvo dos de ellas, las otras 9 bien pudieron suponer más puntos para los blanquillos de haber mostrado un poco más de puntería, de haber tenido el punto de mira unos milímetros más afinado. 

Loading...

Narváez ha fallado culminaciones llevándolas a los palos en 3 ocasiones. A Bermejo le pasó 2 veces. Y, con una, aparecen en el reparto de este tipo de remates fallidos Larrazabal, Gabriel Fernández, Zanimacchia, Iván Azón, Adrián González y Alegría, estos tres últimos en el referido último duelo en campo albaceteño. 

De los 11 postes, los 2 que no generan lamento porque el Real Zaragoza acabó ganando son aquel de Bermejo ante el Fuenlabrada en La Romareda, un disparo lejano en el minuto 18, y el de Narváez ante el Lugo, también en el estadio municipal, en una rosca de las suyas que se le fue al larguero/escuadra. En ambos casos el equipo aragonés terminó venciendo 1-0 y no cupo subrayar estos remates cercanos al gol como opciones de primer orden perdidas en el limbo. 

Los otros 9 sí que pudieron suponer, con la suerte favorable al máximo, hasta 10 puntos más de los que ahora tiene el Real Zaragoza. El presente sería bien distinto. 

Larrazabal reventó el balón contra el larguero ante el Sabadell en el minuto 6, una noche en la que el marcador final fue 0-0. Narváez chutó al poste izquierdo del Mirandés en Anduva en el minuto 63, con el marcador inicial aún vigente, en un día en el que el Zaragoza perdió 1-0 en el último segundo. 

En el duelo contra el Girona, que se empató 2-2 en La Romareda con dos goles in extremis de Narváez para equilibrar un 0-2 letal en tiempo de aumento (minutos 92 y 94), dejó la boca agria al zaragocismo, pese a semejante milagro, porque antes hubo dos remates a los palos: uno de Bermejo, en el minuto 18 (aún con 0-0) y otro, un cabezazo de Gabriel Fernández en el 61.

En Cartagena, hace nada, al inicio del partido -con el 0-0 pues en el tanteador- Zanimacchia remató en semifallo al poste derecho dentro del área. Y, sabido es, el siguiente y último capítulo lo compone el póquer de postes del viernes en Albacete de imborrable y doloroso recuerdo. 

Los rivales, por el contrario, solo ha tirado 3 veces a los postes zaragocistas. Fue anecdótico el cabezazo de Zarfino (Tenerife) al larguero en el minuto 5 del duelo del Heliodoro Rodríguez, pues los canarios acabaron ganando igualmente al Real Zaragoza por 1-0. Sí que pudo ser decisivo el de Juan Hernández (Sabadell) en La Romareda, en aquella falta directa lanzada al poste derecho de Cristian Álvarez, batido y haciendo la estatua rendido, ya en el minuto 67. Y también el de Gerard Valentín, del Lugo, en el minuto 19 del duelo que acabaron ganando los zaragocistas por 1-0. 

Los cálculos y análisis son sencillos de hacer una vez se tienen estos datos en la mano. Eso sí, teniendo en cuenta que los postes son fallos o, en todo caso, no son aciertos. Y que los palos son piezas fijas, inmóviles, no interfieren jamás ningún disparo sobre la portería. No es buen síntoma pegarle demasiadas veces a los postes o el larguero. Conviene atinar entre los tres, dentro. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión