real zaragoza

Torrecilla: "No habrá una gran revolución de la plantilla en el mercado de invierno"

El nuevo director deportivo del Real Zaragoza advierte de que "lo más importante es que los fichajes estén ya dentro del equipo actual".

Miguel Torrecilla, este mediodía en la puerta de la sede del Real Zaragoza en La Romareda.
Miguel Torrecilla, este mediodía en la puerta de la sede del Real Zaragoza en La Romareda.
Oliver Duch

Miguel Montes Torrecilla es desde el pasado día 7 del presente diciembre el nuevo director deportivo del Real Zaragoza, como relevo del destituido Lalo Arantegui. Nacido en Salamanca en octubre de 1969, exjugador profesional y ejecutivo futbolístico desde su retirada, llega al equipo aragonés en la más delicada situación deportiva de su historia. Su objetivo es evitar el descenso a Segunda B tras un torcido inicio de liga que tiene al equipo en el fondo de la clasificación y con un rendimiento alejado de cualquier previsión inicial.

¿Es esta la encomienda más arriesgada y complicada de toda su carrera profesional?

He estado antes en clubes históricos y, como el Real Zaragoza, de alta relevancia social en sus ciudades y comunidades, casos del Betis, el Celta o el Sporting de Gijón pero, en efecto, estoy ante mi mayor reto como director deportivo en 20 años de experiencias.  Sin duda alguna. Esta situación conlleva muchas cuestiones anejas, me exige muchísimo y yo debo exigir, a su vez, a toda la gente que me rodea en esta andadura. 

Estaba usted trabajando hace 15 días en Bélgica, ejercía su trabajo en el Waasland Beveren. No estaba en el paro. ¿Cómo se ha de valorar que el Real Zaragoza no acuda al escaparate de gente libre y le obligue a cortar su vínculo con los belgas?

Es un matiz importante para mí. Yo soy consciente de los grandes profesionales de lo mío que hay ahora sin trabajar y el hecho de que el Real Zaragoza me elija a mí como primer candidato yo lo pondero mucho. No tenía previsto dejar Beveren en tan solo tres meses. Surgió esta oportunidad, vino un transatlántico como el Zaragoza y no lo pensé dos veces. La primera llamada la recibo en pleno partido contra el Mouscron. Hablé al final con mi mujer, respondí al club y la decisión estaba ya tomada. 

¿Tenía una cláusula de desenganche con el Beveren o tuvo que litigar con ellos?

No. No tenía nada escrito y tuve que negociar la salida. Lo hice con el enlace de los propietarios norteamericanos de ese club belga. Son los dueños del Philadelphia 76ers de la NBA, del Crystal Palace de la Premier League, están también con los propietarios de Phoenix Suns... El Beveren es un club pequeño ahora en Bélgica, pero ubicado dentro de un conglomerado de empresas de altura financiera en el mundo. Un engranaje muy potente. Dije adiós a gente que está acostumbrada a que vayan a tocar a sus puertas, no fue sencillo explicarles que me iba. Hubo gente de ese club que me ayudó mucho en esas horas. Han sido tres meses difíciles, con el equipo defenestrado al inicio, salvado del descenso por una vía administrativa. Y también ha habido gente en España que me ha ayudado, contactando con los mandatarios americanos para que me dejaran salir. 

Zaragoza es ahora mismo un caramelo envenenado.

Yo siempre creo que, en momentos de máxima dificultad, no debes recrearte en lo negativo. Tú tienes que construir lo positivo que se debe hacer. Si no paras de dar vueltas al negativismo, eso te influye irremediablemente en el día a día para mal. Yo vengo a reconstruir y, para ello, la gente tiene que ver en mí alguien optimista, que trabaje a grandes revoluciones. Sé que el Real Zaragoza requiere de mi mejor versión. Y nadie puede tener dudas de que esto se va a sacar adelante. Pero ni una sola. 

¿Tenía claro que Juan Ignacio Martínez 'Jim' era su entrenador para este reto?

Sí, sí, sí.... clarísimo. Siempre trabajas con candidatos, y había hasta tres. Pero el primero era él. Eso sí, quise esperar a ver cómo evolucionaba Iván Martínez con los resultados. Llegaban los partidos inmediatos de Almería y Gijón. Si el equipo hubiera respondido bien ahí no tenía necesidad alguna de cambiar al entrenador. Si un técnico funciona, si Iván hubiese entrado en dinámica de ganar, la construcción del futuro hubiera sido con él. Pero no fue así. En Gijón, al acabar el partido con una nueva derrota, le dije mi decisión a Iván y comuniqué a Juan Ignacio que se hacía oficial su nombramiento. Todo estaba hablado con sus asesores por si sucedía lo que ocurrió.

Torrecilla y Jim tienen un papel estelar en la salvación del Real Zaragoza de aquí a mayo. Pero, en estos primeros 35 días, es usted el protagonista al 95 por ciento. El mercado invernal es clave. 

Desde que se sacó la normativa del mercado de invierno todos los directores deportivos tenemos la oportunidad de tomar decisiones importantes para nuestros equipos. Pero, ojo, no tomarlas también es una decisión posible. 

¿Qué quiere decir con esto?

Que a veces, las menos es verdad, acudimos al 'Virgencita, Virgencita, déjame como estoy'. Tengo muy claro que, haga lo que haga en enero, la influencia de la actual plantilla del Real Zaragoza es la que va a hacer posible que logremos el objetivo de la permanencia. No los movimientos por ejecutar, no los fichajes que puedas traer, si logras que funcionen. 

Ese es un mensaje claro para todo el mundo, dentro y fuera del vestuario. 

No podemos hacer un cambio revolucionario en número. No habrá una grandísima revolución. Quizá sí algún detalle, en determinada posición. Lo más importante es que los fichajes estén ya dentro de tu plantilla. Por ejemplo, los que no han podido jugar aún con Juan Ignacio Martínez porque están lesionados. Para él, han de ser como fichajes en cuanto estén aptos. Pero quede claro que lo más importante es reactivar a jugadores que están aquí y que no han rendido bien por lo que sea. 

¿Con cuánto dinero va a poder trabajar el mercado de invierno?

Yo no quiero que la gente confunda que no vamos a fichar a muchos jugadores por falta de capacidad económica. Si va a ser así es por el nivel deportivo de esta plantilla, que yo considero que es suficiente para lograr el objetivo de la permanencia, objetivo que es evidente que no era el inicial pero que ha terminado por ser el real. Esto es todo una situación de origen mental. Hay que convencer a este equipo del Real Zaragoza de que están más que capacitados para competir y ganar en Segunda División. El mensaje hoy no es subir a Primera, es seguir en Segunda y prepararnos para, en el futuro, volver a pelear por el ascenso. Hemos cambiado el mensaje y eso debe ayudar al grupo a reaccionar.

¿No puede cuantificar ahora mismo la cantidad de euros con las que va a trabajar enero?

No. Dependerá de muchos factores. El club, su área financiera, está en pleno trabajo con La Liga para perfilar esto. Cuando regresemos del parón de Navidad, el próximo lunes, esperamos tener ya la certeza de esa cifra exacta. Estoy trabajando opciones, fichajes en distintos puestos, pero sin poder hacer nada más que esperar. Ahora bien, si al final decidimos que solo vamos a fichar a una o dos incorporaciones, tampoco tendrémos dependencia directa de esa cifra dineraria.

¿Los fichajes que puedan venir dependen, por lo tanto, en gran medida, de las salidas que usted pueda obrar de la actual plantilla?

Dependemos de varios factores. Habrá que ver qué nos ofrece el mercado, saber con certeza del dinero del que disponemos respecto del límite salarial que nos conceda La Liga y, asimismo, discernir lo que podemos liberar por nuestra parte a base de salidas de jugadores del actual vestuario. Vamos a tener que mover jugadores nuestros en el mercado para equilibrar todos los movimientos, para liberar masa salarial, eso también está claro. 

Esto lo sabe Jim desde su llegada.

Por supuesto. Y él sabe cómo me gusta trabajar a mí. Todos los movimientos que yo hago y haré los sabe él. A mí no me gusta imponer los jugadores al entrenador. Me gusta trabajar los perfiles con el técnico, ver las posibilidades y, al final, conjuntamente, elegir los candidatos con el entrenador. Nadie se puede quejar de que he traído jugadores sin consenso.

Las salidas a las que alude, ¿giran en torno a los cedidos Gabriel Fernández, Zanimacchia o Tejero?

Yo no centro el caso de las salidas en los cedidos específicamente, por el mero hecho de que ostenten ese cartel. Esto es rendimiento, es el día a día. Juan Ignacio Martínez está satisfecho con el rendimiento de cualquiera de esos tres que cita. La leyenda urbana de que los cedidos se desenchufan los primeros no es verdad. Hay cedidos que te ayudan a conseguir los objetivos. Es un mercado útil.

Digamos que es más fácil dar salida a un futbolista propio que revocar un préstamo de otro club.

Las negociaciones para romper una cesión son siempre las más complicadas. Porque no es lo mismo convencer a un jugador para contratarlo que convencerlo para que se vaya. Y, en este caso de los préstamos, has de trabajar la operación con sus agentes, con sus clubes propietarios... exige mucho más de lo normal.

¿Va a tener que acudir al mercado extranjero, exótico, más que al nacional, tal y como están las cosas?

En el mercado nacional el Real Zaragoza siempre será el Real Zaragoza. Creo que esto no se va a perder nunca. Este club seduce en cualquier disyuntiva o elección de muchos jugadores. Vamos a tener opciones en el mercado español este invierno. Pero es un mercado especial, pos pandemia, que desconocemos en muchos aspectos aún. Vivimos tiempos difíciles en el fútbol profesional. España es nuestro primer caladero por obligación. Siempre lo será. Si no, se acudirá fuera de las fronteras. Pero primero, lo de aquí. 

¿Y la cantera?

Pues considero que has de mirar siempre a tu cantera para, si tienes en ella lo que necesitas, no gastarlo fuera. Eso yo lo tengo muy claro. Digo con rotundidad que Francés, Francho e Iván Azón son jugadores de la primera plantilla al cien por cien. No van a bajar nunca más al Aragón. 

¿Tendrán dorsal del primer equipo en enero?

Quizá por protocolo financiero no sea posible esto y continúen con los mismos que hasta ahora, pero ellos son jugadores de la plantilla profesional. Por ello, por número, por salud del vestuario, es obligado que demos salidas. Lo fundamental son las salidas ahora mismo.

¿Puede adelantar algún nombre?

No. No es aún conveniente. Estamos empezando a hablar con sus representantes y, por deferencia, ellos han de ser los primeros en saber nuestras intenciones. 

En verano se marcharon 42 goles del mecanismo ofensivo del Real Zaragoza. Ahora, salvo Narváez, nadie más ha marcado un gol en tres meses, salvo el tanto anecdótico de Adrián González. ¿Va a centrar su reconstrucción en fichar gol?

El entrenador, Jim, tiene que decir lo que ve al respecto. Él verá lo que le transmiten en los ensayos. Todos esos jugadores, Gabriel Fernández, Vuckic, Larrazabal, Zanimacchia, Bermejo... en sus anteriores equipos, en sus trayectorias, han marcado goles. Vamos a dar un tiempo para definir qué hacemos en ese apartado. Estamos mirando incorporaciones para todas las líneas en previsión de lo que pueda suceder. No sé aún si nos centraremos en puestos específicos de la delantera o sí, al final, decidiremos que es mejor apuntalar el medio campo o la defensa. Por ahora, calma.

Desde Holanda, por ejemplo, llegan noticias de que ha contactado con el central Riera, del NAC Breda y que estuvo con usted en el Celta. 

No, no. Nosotros no hemos iniciado ni una sola operación con ningún jugador. Con ninguno en concreto. El entrenador acaba de aterrizar, tiene un periodo de una semana para trabajar estos temas y, a la vuelta del equipo tras la Navidad empezaremos a hilar las cosas. A día de hoy, no hemos dado un solo paso para fichar. Lo primero, incluso, será dar alguna salida.

¿Cuál es la repercusión que está notando en su vida diaria por haberse hecho cargo del área deportiva del Real Zaragoza?

Enorme. Están siendo días de infinidad de llamadas, de contactos. En 20 años en esta función en el mundo del fútbol uno acaba con una agenda enorme de personas. Nadie ha faltado a la felicitación o el mensaje de apoyo y ayuda. El 80 u 85 por ciento de esa agenda son agencias, representantes, agentes de jugadores. Es un volumen de personas tremendo en todo el mundo que te dan un sostén anímico importante. Este Real Zaragoza es un club histórico, grande, que ahora parece un Titanic, un transatlántico que parece hundirse... pero no va a ser así. A este lo vamos a sacar a flote. Hay mucha gente que va a hacer que el Real Zaragoza esté siempre bien posicionado en el mercado del fútbol. 

¿Su postura personal es 'no tengo nada que perder, si esto sale bien soy un héroe y, si sale mal, no tengo la culpa del pecado original de los males del Real Zaragoza'?

No tengo la palabra 'fracaso' en mi cabeza. Me la ha puesto en el mantel y no la quiero, yo no la digiero. El fracaso es para mí como el gluten a los celiacos. Voy a vivir todo al día. Ahora solo existe Cartagena, Cartagena y Cartagena. Si no pensamos en ganar, en ir paso a paso, en ver las cosas con positivismo, mal nos va a ir. El foco es el fútbol, el siguiente partido, no el mercado, ni el director deportivo, ni el entrenador. No hay salvadores, ni milagros. Solo trabajo y talante ganador. Aparquemos lo malo y el pesimismo. Con eso no se va a ningún sitio cuando es necesario reaccionar como ocurre ahora en Zaragoza. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión