real zaragoza

La metamorfosis de Baraja da este domingo un nuevo paso adelante

El entrenador zaragocista quiere avanzar en su plan de hacer un grupo fuerte mentalmente, espartano, capaz de ganar partidos desde la austeridad, la paciencia y el control.

Rubén Baraja dirige el entrenamiento de ayer.
Rubén Baraja dirige el entrenamiento de ayer.
Guillermo Mestre

Con la paz mental y ambiental que provoca la buena clasificación lograda por el Real Zaragoza en los tres primeros partidos jugados –difuminando incluso el hándicap de partir con dos partidos menos que la inmensa mayoría de rivales–, el equipo que dirige Rubén Baraja afronta hoy ante el Málaga el reto de dar un salto cualitativo apreciable –desde todos los prismas– en su método futbolístico.

En Zaragoza, entre la ingente masa de aficionados que envuelven y siguen al viejo club blanquillo en el día a día pese al calvario de vivir ocho temporadas seguidas en Segunda, ya se ha dejado un tanto de lado lo del paladar exquisito y esos viejos clichés que subyacen en los análisis históricos de décadas y décadas de fútbol en Torrero y La Romareda. La gente sigue aún rumiando el fiasco del curso pasado, con el mejor y más vistoso Zaragoza de esta época negra, el que dirigió el mítico Víctor Fernández y que se vio colapsado por la pandemia mundial cuando iba disparado en la clasificación, invicto en toda la segunda vuelta. La herida aún sangra.

La hinchada blanquilla, ahora, entre penas y moratones, solo quiere ver ganar a su equipo sea como sea. Conocida la rugosidad de la Segunda División actual, la fealdad y especulación constante del fútbol de plata en 2020, el realismo se ha apoderado de las opiniones que otrora propugnaban belleza, filigrana y espectáculo. Además, nadie va al campo. Las gradas están vacías, mudas, inertes. Las ansias quedan estranguladas al otro lado de un televisor.

Rubén Baraja, el entrenador que ha heredado –complicada sucesión– esta materia, ha llegado con la misión de mutar la faz y las conductas del equipo. Sin capacidad dineraria para suplir una docena de bajas cantadas de antemano, todas en la zona de creación y del gol, el club le ha dado al técnico un equipo recompuesto en más de la mitad de sus piezas. Y éste ha asumido la tarea de cambiar el chip, de adecuarlo a lo que es un club con un presupuesto medio-bajo en Segunda, con mucha historia pero con un presente lleno de apreturas y carencias.

Baraja fue claro anteayer en la rueda de prensa previa a esta cita de hoy ante el Málaga. «No es fácil ganar en esta categoría. Estoy tratando de inculcar a los jugadores que el trabajo mental es la clave para vencer en muchos de ellos. Es crucial tener los marcadores vivos hasta el final, llegar a los últimos minutos con opciones aunque el juego no sea vistoso. Tenemos que lograr ser un equipo competitivo en este sentido, fuerte, seguro de sí mismo», quiso remarcar el pucelano.

«No es fácil ganar en esta categoría. Quiero inculcar a los jugadores que el trabajo mental es la clave para vencer en muchos partidos en Segunda»

A Baraja, en este plan que tiene como fin la metamorfosis de un Zaragoza –que pase de tener un aire de equipo que proponía juego y que racaneaba poco tácticamente a otro mucho más sólido, sobrio y calculador–, le viene bien que no haya público en La Romareda. Así todo es más fácil y, tal vez, sea una ayuda del destino para que el objetivo lo pueda cumplir. «A mí me encantaría que hubiese aficionados en el estadio», dice no obstante el Pipo, como no puede ser menos, explícitamente. A la par, recuerda que cada partido en Segunda es «muy equilibrado, muy ajustado en juego, con pocas ocasiones, donde se ganan muchos puntos en los minutos finales, sin una gran superioridad de unos sobre otros». Es lo que él ha vivido en Elche, Vallecas, Gijón y Tenerife. O sea, en equipos ex de la élite que han sufrido como perros en el pozo de la serie B. Hoy, ante el Málaga, se espera otro paso hacia ‘la nueva normalidad’ zaragocista.

«Es crucial tener los marcadores vivos hasta el final, llegar a los últimos minutos con opciones aunque el juego no sea vistoso»
Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión