Soro, Delmás, Torres y Burgui entran en el once del Real Zaragoza en Albacete, sin Clemente ni Zapater

Penúltima estación de la liga de Segunda División 2019-20 para el Real Zaragoza: será esta noche del viernes 17 de julio, a las 21.00, en el estadio Carlos Belmonte de Albacete. Solo quedan 6 puntos en disputa y los zaragocistas parten en franca desventaja respecto de los puestos de ascenso directo (el primero, el del Cádiz, ya está adjudicado; solo falta otro por definir). Ocupan la 4ª posición en la tabla con 62 puntos, dos menos que el Huesca (el actual 2º, con 64) y uno menos que el Almería (3º, con 63). Los de Víctor Fernández, que llegan desvencijados a la recta final del torneo en el ámbito físico -también en el fútbolístico-, están obligados a ganar los dos partidos restantes y, si lo lograsen, esperar sendos fallos de los oscenses y los almerienses.

El Albacete, rival de esta crucial jornada, afronta el duelo en situación desesperada, pues es el anteúltimo en la clasificación (20º), con 46 puntos y a uno del ras de la salvación, en una pelea a vida o muerte con el Lugo, el Numancia, el Deportivo de La Coruña, la Ponferradina y el Málaga (dos de ellos bajarán a Segunda B el lunes). Los manchegos son los que peor lo tienen para sobrevivir del sexteto de implicados en la catástrofe de descender a la liga no profesional. Por este matiz, el Real Zaragoza va a encontrarse a un adversario histérico, nervioso en grado extremo, en fase de coletazos de muerte, con todo el peligro que ello conlleva en el mundillo del fútbol in illo témpore. Va a ser un encuentro de alto voltaje, clásico de los finales de cada temporada.

Víctor Fernández sigue cautivo de la inacabable plaga de lesiones que está destrozando el día a día blanquillo desde que la liga se reanudó tras el coronavirus hace un mes. Guti se quedó en casa esta vez por un problema muscular (el enésimo del equipo). El portero Cristian Álvarez y el goleador Luis Suárez, las dos estrellas de la plantilla por rendimiento, “no están para jugar”, según reconoció el propio entrenador 24 horas antes del partido en rueda de prensa. Sin embargo, ambos lo harán en campo albaceteño, forzando al máximo. Hay más jugadores tocados que hace días son alineados tras ser infiltrados con calmantes: Vigaray, Puado, Kagawa, Delmás, Dani Torres… Y las bajas no anunciadas que se han hecho efectivas una hora y cuarto antes del duelo son las de Zapater y el central Clemente, por lo que Vigaray dejará el lateral para jugar en el eje de la zaga y entrará en el carril diestro Delmás. Asimismo, retornan al equipo Soro, Torres y Burgui.

Por todos estos detalles, esta vez, el técnico del barrio Oliver opta por alinear a Cristian Álvarez; Delmás, Vigaray, Atienza, Nieto; Eguaras, D. Torres; Burgui, Soro, Puado; y Luis Suárez. En el banquillo se sentarán Ratón, Carlos Azón, Clemente, Francés, Nick, Zapater, Kagawa, Blanco, Pereira, Baselga y Linares.

Por parte albaceteña, su entrenador, el exzaragocista Lucas Alcaraz (predecesor el año pasado de Víctor Fernández en la caótica temporada 18-19), cuenta con la importante baja del delantero Fuster, expulsado el último día en Elche. Y su punta referencial, el internacional ucraniano Zozulia, llega bajo mínimos por una lesión que le impidió jugar ante los ilicitanos. Los manchegos juegan bajo la obligación de ganar los dos partidos restantes y esperar tropiezos de sus adversarios directos. O sea, misma situación que los zaragocistas pero en el otro lado de la clasificación, en lo más bajo y letal.

Alcaraz jugará con Nadal; Pedro, Gorosito, Kecojevic, Fran García; Erice, Maikel Mesa; Álvaro Jiménez, Chema Núñez, Ojeda; y Zozulia. Sus suplentes serán Brazao, Rodríguez, Arroyo, Benito, Barri, Caballo, Susaeta, Caro, Azamoum, Eddy Silvestre, Acuña y Miguel Ángel. Lo más llamativo es la presencia de otro exblanquillo, el otrora delantero Pedro Sánchez, ahora utilizado por Alcaraz como defensa lateral derecho.

Arbitrará el colegiado vasco Gorostegui Fernández-Ortega. La noche es calurosa en Albacete, con 30 grados al inicio del partido, tras haberse alcanzado durante el día los 35. El césped del Carlos Belmonte presenta un buen estado.