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Pombo vuelve a interesar al Granada
El club andaluz, que ya presentó una oferta por el delantero del Real Zaragoza durante el pasado mercado de verano, regresa sobre los pasos que dio en este sentido.
Acaso el futuro de Jorge Pombo esté en Primera División, por más que el delantero aragonés no esté atravesando por su mejor momento en el seno del Real Zaragoza y a menudo se quede fuera de los planes deportivos de Víctor Fernández. El Granada, club de Primera División, que ya mostró interés por él durante el pasado mercado de verano, está volviendo sobre estos pasos.
Con sus instantes de brillante luz y zonas de penumbra, Pombo es en todo caso un futbolista del gusto de Diego Martínez, entrenador del conjunto nazarí, que ha hecho un largo seguimiento de este futbolista. En la dirección deportiva de Granada, se considera, de hecho, a Pombo como una pieza interesante para incrementar los recursos de su plantilla en la zona de vanguardia.
Fuerte, con capacidad contrastada para jugar de espaldas a la portería o para mirarla de frente, las virtudes del jugador aragonés disfrutan de cierto valor en el mercado, y, al mismo tiempo, aportan una vía de salida para una situación incómoda, habida cuenta de los pocos minutos de los que está disponiendo en el Real Zaragoza.
Luis Suárez ha devenido en una elección indiscutible para Víctor, por razones más que obvias a estas alturas. Como complemento del colombiano, ha irrumpido con fuerza Javi Puado, que en dos partidos ha dado razones más que suficientes para la titularidad.
De este modo, a Pombo no le quedan de ordinario más que papeles en cierto modo secundarios: suplencia en el banquillo y espera a que el desarrollo de los encuentros le abran alguna ventana. En ocasiones, ni siquiera eso. Ya ha experimentado a lo largo de la presente campaña la experiencia amarga de no entrar en la convocatoria.
En los días finales del pasado mercado de verano, el Granada ya presentó una oferta formal por Jorge Pombo; pero Lalo Arantegui, director deportivo del Real Zaragoza, la consideró insuficiente en los términos económicos en que se formuló: un bajo traspaso (cien mil euros, afirmó Arantegui) y derechos del 10% sobre el valor de un posible y futuro traspaso a una tercera entidad.
