Raúl Guti y Alberto Guitián fueron las llamativas ausencias del entrenamiento del Real Zaragoza este jueves en la Ciudad Deportiva. Los dos se fueron al gimnasio a causa de sendas molestias físicas, un fuerte golpe en una pierna en el caso del canterano, problemas musculares en el caso del central cántabro. 

Guti, que viene entrando en juego en los últimos partidos -siempre desde el banquillo- tras superar la última recaída de la pubalgia que ha deteriorado su temporada, tras haber sido operado en agosto, recibió un traumatismo doloroso al final del entrenamiento del miércoles y no pudo tomar parte en la sesión previa al viaje a Almendralejo (donde juega el equipo el sábado a las 6 de la tarde).

Por su parte, Guitián se ha notado en las últimas horas un dolor muscular que aconseja precaución. En principio, el defensor no va a jugar en el campo del Extremadura, pues está sancionado por acumulación de 5 tarjetas amarillas, pero todavía queda la opción de que el Comité de Apelación atienda este jueves el recurso presentado por el Real Zaragoza y le sea anulada la última amonestación, la que vio ante el Deportivo de La Coruña el pasado sábado en La Romareda. 

Todo queda pendiente de su evolución en las próximas 24 horas para saber si están aptos de cara al desplazamiento a tierras extremeñas, en especial en el caso de Guti, con el que Víctor Fernández cuenta en sus planes tácticos. Lo de Guitián, salvo que al final se le indultase de su castigo disciplinario por parte de la Federación, puede quedar en algo anecdótico por motivos obvios.

En otro plano informativo, la mañana trajo el regreso al grupo, al inicio del ensayo, de Dorado y Lasure, que llevaban varias semanas de baja por dolencias diversas de índole muscular asimismo. Tanto estos dos jugadores como Benito, que viene ejercitándose con los demás desde el martes, tienen casi imposible ser incluidos en la citación zaragocista para Almendralejo, pues su tono físico no es aún el adecuado para poder jugar un partido de estas características tan exigentes.