El Real Zaragoza gasta una bala

El conjunto aragonés se mantiene dentro de los puestos de promoción en la antesala de dos jornadas seguidas en casa

Los jugadores del Real Zaragoza y del Cádiz se saludan al comienzo del partido.
El Real Zaragoza gasta una bala
José Aniés

La dinámica de las últimas jornadas había empujado al Zaragoza hacia la zona de promoción con fuerza y firmeza, hasta el punto de consolidarlo y atornillarlo en esas posiciones de privilegio, abriendo, incluso, un margen de seguridad que permitía sucesos como el de anoche en Cádiz, una derrota contra un rival directo que le rebasa ahora en la tabla. Esa bala la gastó el Zaragoza con su derrota en el Ramón de Carranza. Cayó, emborronó en cierto modo su trayectoria imponente porque su juego fue inferior al del rival, pero, ni mucho menos, su situación se ha vuelto grave. Sigue en tierra de play off, quinto clasificado. Ha perdido eso sí su colchón de puntos y la cuarta, quinta y sexta posiciones se han convertido en una batalla con seis aspirantes: Cádiz, Zaragoza, Numancia -los tres conjuntos ahora mismo en promoción- más los perseguidores: un Valladolid en fase creciente, más los irregulares Osasuna y Oviedo.

Una victoria en Cádiz hubiera propulsado al Zaragoza de manera casi definitiva hacia su objetivo. No de modo matemático pero sí virtual. Ese margen de error ya lo ha consumido la escuadra de Natxo González, que aún puede mirar el horizonte con cierto ánimo positivo. A falta de tres jornadas, es quinto. Respecto al séptimo, el Valladolid, solo tiene un punto de ventaja, pero antes que el Zaragoza caería de promoción el Numancia. Por lo que, aunque el colchón se ha reducido en puntos, no lo ha hecho tanto en cuanto a posiciones. También queda una jornada menos: nueve puntos por disputar en este esprint final de temporada regular. De esos nueve, el Zaragoza se juega seis en dos compromisos consecutivos en casa, frente a Albacete y Valladolid. Si se mantiene fuerte en La Romareda, el objetivo será un hecho.

Cualquier cálculo a estas alturas queda muy condicionado por los duelos directos. Por ejemplo, al Zaragoza quizá le valgan cuatro puntos, pero quizá no le valgan si la derrota es contra el Valladolid. La próxima jornada, además, reserva un Numancia-Osasuna. Uno de los dos rivales directos, o los dos, se van a dejar puntos por el camino. Aún quedaría, en la última jornada, otro duelo que puede ser determinante para la configuración del cuadro del play off: el Valladolid-Osasuna del José Zorrilla.

Mínimo 4 puntos más

La única certeza a falta de tres partidos para el Zaragoza es que el ascenso directo ya es aritméticamente imposible. Hay otro episodio que va también camino de la certidumbre: la tercera plaza de la clasificación será para aquel equipo al que se le esfume finalmente el ascenso directo: Rayo Vallecano, Huesca o Sporting de Gijón. El resto, queda por resolver. Tres plazas para seis equipos, una vez que el Granada ha quedado descabalgado de la pelea.

La derrota en Cádiz, aunque impide al Zaragoza zanjar prácticamente su objetivo, no le altera en gran medida su hoja de ruta: sigue dependiendo de sí mismo en la antesala de dos partidos seguidos en La Romareda. Si los saca ambos con victoria, lo tendrá prácticamente hecho.

Ante todo, hay un partido crucial, contra el Valladolid. Esa cita podría hacer que incluso al Zaragoza pudieran servirle cuatro puntos si el precio final de la sexta plaza no se va más allá de los 66 puntos, que es actualmente su proyección.

La próxima jornada, los rivales directos del Zaragoza tienen los siguientes enfrentamientos: el Cádiz visita a un Barcelona B reenganchado a las opciones de permanencia, el Valladolid -con dos salidas seguidas por delante- va a Lorca, está ese Numancia-Osasuna, clave en el desenlace de la promoción, y el Real Oviedo recibe al Sevilla Atlético. El Zaragoza deberá cumplir con una victoria contra el Albacete.

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