La Federación se da una semana para decidir sobre el asunto de Borja Iglesias

El Comité de Competición ni sanciona ni abre expediente por ahora al jugador del Real Zaragoza tras la denuncia de la LFP por mandar callar los insultos que recibió en Tarragona.

Borja Iglesias, junto a Pombo, celebra el 0-2 el sábado pasado en Tarragona con el dedo índice en los labios, tras haber sido fuertemente insultado durante el partido por parte de los aficionados tarraconenses.
Borja Iglesias, junto a Pombo, celebra el 0-2 el sábado pasado en Tarragona con el dedo índice en los labios, tras haber sido fuertemente insultado durante el partido por parte de los aficionados tarraconenses.
José Carlos León

La Real Federación Española de Fútbol, a través de su primer comité disciplinario, el de Competición, reunido este miércoles en Madrid, se ha dado una semana para tomar una decisión firme sobre el asunto de Borja Iglesias. El delantero del Real Zaragoza fue denunciado el martes por la propia Liga de Fútbol Profesional por el gesto que llevó a cabo tras marcar el 0-2 en el último partido de liga jugado el sábado en Tarragona frente al Nástic, cuando con el índice de la mano derecha sobre los labios instó al público local que le insultó durante el partido a que guardase silencio y dejara de faltarle al respeto a base de improperios de todo tipo de gravedad y elevado tono.

El Comité de Competición, en sus resoluciones y castigos relativos a la pasada jornada, la 27ª en Segunda División, no cita en ninguno de sus documentos oficiales el caso Borja Iglesias. Tampoco ha remitido comunicación interna alguna ni al Real Zaragoza como SAD ni al propio interesado, del futbolista compostelano del club aragonés. Es la consecuencia de que los jueces de Competición no han invertido ni un solo segundo, en su reunión ordinaria de este 21 de febrero de 2018, a tratar esta denuncia de la LFP sobre Iglesias.

Así, de entrada, el Comité federativo no sanciona ni abre expediente por ahora al jugador del Real Zaragoza porque, simplemente, no tienen claro cuál es la hondura del asunto que, por lo tanto, en estos momentos no existe como tal. La forma jurídica que le dan, nominalmente, es la de "apertura de una información reservada" al respecto. Algo que ya hicieron los mismos letrados hace 15 días cuando ocurrió el caso Piqué, asimilable en cierto modo al de Iglesias, en el partido Espanyol-Barcelona de Primera División.

en ese limbo flotará esta denuncia de la LFP a Borja Iglesias hasta la próxima reunión del Comité de Competición en Las Rozas, que será el miércoles que viene, día 28 de febrero. En ese momento decidirán, bien si es necesario abrir expediente para aportar más datos de las partes, bien si directamente la cuestión merece un castigo disciplinario (como sugiere la LFP en su denuncia), o bien si archiva la referida denuncia y todo queda en nada (resolución final e inerte que ya han tomado en relación al citado caso Piqué).

Así que, por ahora, no hay ni un solo movimiento ejecutado en la Federación a instancias de la denuncia de la Liga de Fútbol Profesional. Al menos así será durante los próximos 7 días. Y, si el final es el mismo que el del asunto Piqué, quedará en agua de borrajas. 

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