El Real Zaragoza deberá jugar de blanco por completo en Huesca

La Liga de Fútbol Profesional no permite a los zaragocistas portar su pantalón azul en El Alcoraz pese a que es de otro tono que el oscuro de los oscenses.

Dos momentos del partido Eibar-Real Zaragoza de abril de 2009, en Segunda División. Vestidos totalmente de blanco, los zaragocistas celebra un gol de Gabi (ganó el Zaragoza 2-3). Ahí se ve a Zapater, Arizmendi, Caffa y, detrás, Jorge López. A la dcha. Arizmendi pelea con la defensa vasca en el campo de Ipurúa.
El Real Zaragoza deberá jugar de blanco por completo en Huesca
Toni Galán

Cosas del fútbol del siglo XXI. El Real Zaragoza no podrá jugar este lunes en Huesca con su uniforme habitual y deberá cambiar el pantalón, que no será azul, sino blanco. El club zaragocista ha debido acelerar la incorporación de esa prenda durante la semana, una vez que la Liga de Fútbol Profesional (LFP) decidió que no es posible utilizar el color oficial en la pantaloneta en este duelo de El Alcoraz.

La incidencia viene derivada de la decisión del Kit Selector, la herramienta de la que se dotó la LFP hace unos meses para, con antelación a cada partido, pasar revista a las camisetas, pantalones y medias de cada equipo y definir cómo deben vestir cada jornada según sea el contraste con el rival.

El tono del azul del Huesca, más oscuro, no debería ser impedimento a priori para que el Real Zaragoza luciese su primera indumentaria. Pero, a diferencia de lo que ha sucedido en otros partidos de lo que va de liga con otros equipos, los inspectores cromáticos que la LFP consideran, en este caso, que no cabe esa coincidencia. Tampoco se contempla posible que el Real Zaragoza se vista con su segundo uniforme, rojo por completo, pues se considera cercano en las percepciones visuales al azulgrana del Huesca. Así que la solución, que no es nueva, ha sido encargar a la firma que suministra las prendas de trabajo y juego al Real Zaragoza (Adidas) un pantalón blanco, con los detalles en el azul marino de esta temporada, para que pueda jugarse sin problemas con el árbitro este partido del próximo lunes en la capital altoaragonesa.

Este año, como es sabido desde agosto, el Real Zaragoza no tiene la tercera opción, la avispa (amarilla y negra, en versiones dispares con el paso de las temporadas). Cuestión que depende precisamente del proveedor. Y, después de lo ocurrido hace dos años, cuando el equipo zaragozano jugó con ella en El Alcoraz y se percibieron claros problemas de diferenciación en la noche oscense (era todo muy oscuro, muy similar en la distancia entre los uniformes de ambos equipos), tampoco hubiera sido una solución aceptable salvo que predominase mucho más el amarillo que el negro en el reparto de las prendas, hecho que ha ocurrido pocas veces desde que la avispa surgió en el armario zaragocista en los años noventa.

El Real Zaragoza, en tiempos no muy lejanos, ya utilizó esta fórmula de vestir todo de blanco ante equipos azulgranas. Lo hizo en Primera División en el Camp Nou frente al FC Barcelona y, en Segunda, el año de Marcelino García Toral, en Eibar. Esta vez, lo tendrá que hacer por fuerza en Huesca.

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