Oyarzun supera sus molestias en la rodilla izquierda

Alain Oyarzun volvió a entrenarse con el grupo este lunes en la primera sesión de trabajo de la nueva semana. El extremo zurdo del Real Zaragoza había generado cierta preocupación el pasado viernes en Boltaña, cuando abandonó el campo de Villaboya en el último ensayo dirigido por Natxo González en la concentración pirenaica al sentir dolor y una leve inflamación en la rodilla izquierda, de la que fue operado el año pasado cuando militaba en el Mirandés -cedido por la Real Sociedad- tras una rotura de ligamento cruzado anterior.

El futbolista vasco, al que ese día, de inmediato, se le aplicó hielo y tuvo que seguir la recta final de la estancia en Boltaña sentado sobre el césped con gesto serio, obviamente tampoco jugó el partidillo que el equipo disputó el día siguiente, sábado, en la Ciudad Deportiva ante el filial, el Deportivo Aragón.

Las 48 horas de reposo y tratamiento fisioterápico han sido suficientes para devolver a la rodilla que sigue en proceso de normalización los mínimos de condiciones aptas para que Oyarzun vuelva a trabajar sin merma alguna. Los médicos consideran algo lógico y natural que la articulación responda de este modo a causa de la carga de trabajo que el equipo está llevando a cabo en este inicio de la pretemporada, pues el proceso de readaptación después de transcurrido un año de una rotura ligamentosa suele acarrear este tipo de molestias puntuales. El joven jugador vasco cayó lesionado el verano pasado en un amistoso Mirandés-Eibar y por ello se perdió prácticamente todo el curso, pues solo pudo reaparecer en las dos últimas jornadas de la liga, ya en junio.