La plantilla del RZD Aragón mutará en, al menos, la mitad de sus componentes de cara al regreso a la Segunda División B que tendrá lugar la temporada que viene. En el momento de la despedida del curso 2016-17, que ha concluido con el campeonato de la Tercera División, grupo aragonés, y el posterior ascenso en el choque ante el Calahorra riojano, hasta 8 futbolistas de la plantilla de este año han conocido su salida del equipo. Y dos más están en duda.

Los que ya saben que su futuro está en otro lugar son Buenacasa, Bernal, Chueca, Andrés Barrera, Karol Losin, Carlos López, Jagoba Zárraga y Villalba. Los siete primeros, se desvinculan del Real Zaragoza. El último, el joven Villalba, será cedido para que siga su progresión.

Los dos que dependen directamente del criterio de César Láinez, al quien el club va a renovar su contrato en unas condiciones de sensible mejora respecto del compromiso que ha regido hasta ahora y que volverá a dirigir al filial el curso venidero, son Xiscu y Roy. Ambos jugadores, ya con los 23 años cumplidos y, por ello, sin opciones el año que viene para jugar a caballo entre el primer y el segundo equipo (si jugasen un partido con el Real Zaragoza ya no podrían regresar al B), permanecen por ahora en una situación de duda que habrá de aclararse en breve tiempo.

Por su parte, el ariete Casaló, que fue cedido en enero al Tarazona, no regresará al RZD Aragón.

Si a estas bajas se suman las de los futbolistas que van a seguir la ruta de la promoción interna rumbo al primer equipo, casos de Raí Nascimento, Pombo, Lasure y Delmás (el caso de Zalaya, probablemente se ubique en los terrenos de poder jugar arriba y abajo según convenga técnicamente), es obvio que la remodelación del Aragón para la campaña que viene va a ser importante.

Quienes van a proseguir, según este diseño inicial, son Nieto, Raúl Guti, Jorge Guti, Aparicio, Rotellar y el citado caso de dualidad probable de Zalaya. El juvenil Soro, que acabó jugando con el B ya este curso, tiene plaza fija. Otros jóvenes del siguiente escalón del fútbol base, como Clemente, Subías, Marcén, que también asomaron puntualmente durante el año en el filial, podrán tener su hueco entre los diferentes refuerzos que vayan llegando del exterior para conformar un equipo emergente en la nueva categoría que se reestrenará en agosto.