Pleno de jugadores en el entrenamiento de sábado
Zapater y Xumetra, después de toda la semana al margen, midieron sus fuerzas con el grupo. Dongou y hasta Wilk, trabajaron con los demás.
Todos. Raúl Agné entrenó este sábado, en puertas de recibir al Numancia en La Romareda en la noche dominical (20.00), con la plantilla al completo, algo sin precedentes en lo que va de temporada. Tanto es así que, por primera vez no había ningún joven del filial apuntalando los ensayos del técnico zaragocista con visos de contar para la citación, dado que Raí Nascimento, el único que estaba en el grupo, todavía arrastra un partido de suspensión que deberá guardar este fin de semana.
De este modo, se vio a Zapater y Xumetra, como estaba previsto, midiendo sus fuerzas después de una semana en la que han trabajado al margen por prevención y modulación de sus esfuerzos. José Enrique, que está previsto que vuelva a estar entre los 18 del acta (con opciones de titularidad) tras cubrir ocho semanas de ausencia por una lesión muscular en una pierna, se ejercitó con normalidad para medir su estado definitivo. También Dongou, que está entre algodones desde hace 15 días por los problemas que está evidenciando su rodilla operada en agosto, comenzó la mañana en la Ciudad Deportiva como uno más. E, incluso, el polaco Wilk, de baja absoluta para jugar desde que en septiembre se rompió los ligamentos de la rodilla derecha (la plastia, pues la lesión es repetida del año anterior), ya asoma progresivamente en la rutina de los demás y este sábado 4 de marzo iba calzado con las botas de tacos de manera esperanzadora.
Agné, por lo tanto, acometerá ante el Numancia de Soria un partido con tintes de final para el Real Zaragoza -sumido en una crisis de resultados que lo han asomado al abismo de la parte baja de la clasificación- con variadas opciones a utilizar en su plan táctico.
