El primer día de clase tras las fiestas de Navidad en la caseta del Real Zaragoza ha dejado, a bote pronto, un retrato sencillo y fiel de la figura de Raúl Agné, el entrenador que llegó el 26 de octubre a relevar al destituido Luis Milla. Cuando se acaban de cumplir dos meses frenéticos al mando del técnico de Mequinenza, Alberto Zapater, el capitán y uno de los principales referentes morales de la plantilla zaragocista, ha sido el autor del carboncillo. Al de Ejea se le ha preguntado cómo veía a Agné en el regreso al trabajo. Y así ha contestado:

"Bien. Es un entrenador que tiene muchísima ilusión, eso es lo que más destaca por encima de todo. Invierte muchísimo trabajo y todo lo que nos pide tiene un razonamiento táctico. Tiene muy claro lo que quiere. Pone el cien por cien en cada cosa que hace desde que pisó la Ciudad Deportiva. Y eso lo transmite al grupo". Resulta interesante conocer este parecer que, además de Zapater, coincide en buena medida con la percepción de muchos de los jugadores relevantes del actual Real Zaragoza.