Isaac Carcelén se ha lesionado en el entrenamiento de este jueves. Sufre una rotura muscular en el sóleo de la pierna izquierda, en la parte posterior de la zona gemelar. Al menos, será baja en las próximas tres semanas, una vez diagnosticada la resonancia nuclear magnética a la que ha sido sometido a primera hora de la tarde en el Hospital Quirón.

Esta lesión supone el colofón desgraciado a un mal inicio de temporada del lateral derecho titular del Real Zaragoza, circunstancia que lo ha convertido con el paso de las jornadas en uno de los puntos de discusión táctica en el once de Luis Milla, mucho más al caer el equipo en la mala racha de cuatro partidos seguidos sin ganar en la que se halla inmerso. Isaac, que el año pasado dejó una imagen prometedora en su estreno como zaragocista y en la Segunda División (provenía del filial del Betis, de Segunda B), no ha encontrado en los dos meses de competición que se llevan disputados la cota mínima de rendimiento que lo asemejara al que jugó el curso anterior como lateral blanquillo.

Ahora, esta lesión que le obliga a parar en seco hasta recuperar un músculo importante en la práctica del fútbol, rompe definitivamente sus intentos de retomar el pulso en el lateral diestro de la defensa del Real Zaragoza, en la que, pese a su bajo nivel de prestaciones, Milla lo ha puesto como titular en ocho de los nueve partidos dirimidos hasta ahora en la liga (en el otro, también participó desde el banquillo). El gaditano tiene por delante aproximadamente un mes para superar esta dolencia indeseada y, además, para encontrar la sintonía de la solvencia que se esperaba de él y que hasta ahora no ha hallado.

El joven Fran, fichaje de este verano de 21 años procedente del RM Castilla de Segunda B, se queda como único lateral derecho de la plantilla mientras tanto. Un futbolista que ha evidenciado desde su llegada mejores condiciones para subir la banda en acciones ofensivas que para guardar la posición en clave de fortaleza destructora.

Y Luis Milla tiene ante sí un nuevo panorama en una parte del campo en la que, sorprendentemente, siempre actuó durante los partidos para modificar el dibujo táctico sobre la marcha. Su ya habitual cambio en el lateral derecho queda en suspenso hasta nueva orden. Al menos con los mismos protagonistas del inicio del curso.