Tras retomarse y acelerarse hasta concluir en el acuerdo definitivo las negociaciones para que Marcelo Silva se convirtiera el sábado en el séptimo fichaje del Real Zaragoza, el siguiente en rubricar su firma con el club aragonés debería ser el joven rumano Razvan Popa, defensa central -como Silva- del Inter de Milán Primavera (su filial), un emergente futbolista de 19 años que va a salir cedido en busca de crecimiento en una liga importante de Europa y que tiene desde hace varios días al Real Zaragoza como destino preferente.

El pasado viernes, por motivos estratégicos de la dirección deportiva del club italiano, las conversaciones se aplazaron hasta la mañana del lunes. El fin de semana no ha estado activado el trato por lo tanto. La pretendida culminación del préstamo de Popa al Real Zaragoza por parte del Inter, aunque no va a ser tan rápida como en el seno del cuadro aragonés se pensó hace cinco días, no se estima que pueda descarrilar finalmente. 

De este modo, las próximas horas, la primeras de la semana que va a nacer y que lleva al equipo hasta Boltaña, son las decisivas para que Popa pueda ser la octava incorporación al regenerado vestuario zaragocistas y, de este modo, apuntale un poco más la necesitada zona de centrales en la línea de retaguardia, vacía tras la marcha de Vallejo, Rubén y Guitián y que, hasta la confirmación del fichaje de Marcelo Silva -que aún debe ser presentado oficialmente-, solo dispone de Cabrera como referente provisional, dado que el uruguayo está expuesto en el escaparate en busca de una oferta que favorezca su traspaso antes de que, el 31 de agosto, concluya el mercado estival de fichajes.