Álvaro Ratón, el nuevo portero del primer equipo zaragocista tras dar el salto desde el filial, ya ejerce de portavoz del vestuario. El guardameta gallego de 23 años fue el elegido para valorar lo ocurrido en el partido entre los jugadores de la actual plantilla disputado este sábado en La Romareda ante más de 1.500 seguidores blanquillos. Su fácil palabra y su poso en las comparecencias públicas ponen en evidencia la tremenda personalidad y el perfil humano del orensano, que es ahora mismo el jugador más feliz del vestuario tras firmar el viernes su renovación de contrato profesional por tres temporadas, hasta 2019.

"Cuando fiché por el Real Zaragoza mi objetivo era este. Cualquier jugador que firma por un filial siempre ha de tener la aspiración de llegar al primer equipo. Y mucho más en un club como el Real Zaragoza", subraya Ratón desde el prisma puramente particular. "El año pasado ya hice la pretemporada con el primer equipo, pero yo sabía que entonces era el portero del filial. Ahora es distinto. La ilusión sigue siendo la misma, porque yo la tenía igual que ahora, pero el hecho de haber renovado contrato y estar ya con la primera plantilla me hace sentir muy contento", asegura el arquero de 1,91 de estatura.

Las primeras sensaciones que ha emitido el plantel del también debutante entrenador Luis Milla han sido positivas. En un tiempo en el que es imposible emitir un juicio y llevar a cabo cualquier evaluación consistente -solo suman cinco entrenamientos tras la vuelta de las vacaciones- ha llamado la atención determinados criterios de combinación y el modo de desenvolverse muchos de los jugadores, tanto los veteranos como los recién llegados. Ratón, desde una de las porterías, lo vio así. "El equipo está bien. Es momento de ir cogiendo sensaciones. Estamos empezando, cogiendo ritmo. Y habrá que esperar a después de Boltaña para estar mejor. Pero, para ser el principio de la pretemporada, estamos muy bien", reconoce el portero.

Por último, no podía faltar el guiño a la afición. Hay cierto respeto desde el club a la reacción del graderío, sabedores todos de que el final de la pasada campaña resultó hiriente y llenó de decepción y reproches el talante de la mayoría de zaragocistas para con el equipo. Por eso, observar la positiva reacción de mucha gente cuando la pretemporada aún está balbuceando (ya se ponderó de modo sobresaliente la presencia de público en las presentaciones de Zapater y Cani, así como la afluencia a la campaña de abonados) genera buenas vibraciones entre los futbolistas. Ratón así lo remarca: "Es muy importante que desde el principio la afición nos esté apoyando así. Fue duro lo del final de la temporada pasada, pero ahora es tiempo de nuevas ilusiones, nuevas expectativas y todos hemos de tener nuevos retos", sugiere el nuevo guardameta del equipo profesional del Real Zaragoza.