Carreras podría no sentarse más en el banquillo

El entrenador del Real Zaragoza, expulsado en Soria, podría ser sancionado por cuatro partidos, todos los que restan de liga

Carreras, junto al delegado, Alberto Belsué, se retira del campo en plena protesta hacia el árbitro López Amaya.
Carreras podría no sentarse más en el banquillo
Luis Ángel Tejedor

Lluís Carreras, el entrenador del Real Zaragoza, podría estar impedido de sentarse en el banquillo en los cuatro últimos partidos que quedan de temporada. Expulsado en Soria en los últimos minutos del choque ante el Numancia, la redacción del acta del árbitro andaluz López Amaya puede derivar en una sanción precisamente de hasta cuatro partidos sin poder ejercer sus funciones en el área técnica de la banda. De ser así, Carreras se vería obligado a dirigir al cuadro zaragocista en los duelos ante el Nástic, Huesca, Oviedo y Llagostera desde otra posición en la grada, sin poder dar órdenes directas por ningún medio electrónico a nadie que ocupe el banquillo como responsable, probablemente su ayudante, Sergio Dorado.


De entrada, desde hace dos temporadas, la sanción mínima que supone para un entrenador ser expulsado durante un partido es de dos jornadas. Carreras ya cuenta con esa seguridad. Por ello, su posición no estará sobre el césped ni frente al rival de Tarragona el domingo próximo en La Romareda (12.00) ni en El Alcoraz contra el Huesca (jueves, 26, a las 20.00).


El problema para el preparador catalán es que su expulsión en Los Pajaritos no fue un caso ordinario. El episodio tuvo cola, un alargue en la discusión con el árbitro granadino que acabó redactado en el acta y que augura un castigo superior. López Amaya, en primera instancia, describe en el apartado correspondiente que "en el minuto 89, el técnico Carreras Ferrer, Lluís, fue expulsado por el siguiente motivo: dirigirse a mí gritando y gesticulando con los brazos en alto, en señal de protesta con una de mis decisiones, entrando al terreno de juego aproximadamente tres metros". Esta sería la parte habitual, el motivo concreto del castigo. Pero el juez del partido escribió un anexo en el epígrafe C, el dedicado a 'otras incidencias'-


Ahí, López Amaya incide en que Lluís Carreras, "una vez expulsado retardó su salida del área técnica realizándome gestos con la mano para que me acercase a él, debiendo estar el juego detenido durante treinta segundos, siendo retirado por su delegado de equipo, permaneciendo posteriormente dentro del túnel de vestuarios hasta el final del partido, comunicándole el cuarto árbitro a su delegado que no podía permanecer allí, haciendo caso omiso de nuestras indicaciones". Esta explicación extra, normalmente tendrá refrendo en el grado de la sanción que le aguada al entrenador del Real Zaragoza.

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