Hasta 15 goleadores al menudeo

Ante la falta de especialistas y de jugadores inspirados ante el gol, el Zaragoza reparte sus pocos goles por goteo entre media plantilla

Albert Dorca celebra el 2-1 que marcó ante el Mallorca, junto a Vallejo y Culio.
Albert Dorca celebra el 2-1 que marcó ante el Mallorca, junto a Vallejo y Culio.
Aránzazu Navarro

Dorca se convitió el domingo en el 15º jugador del Real Zaragoza que marca gol en lo que va de esta temporada 2015-16. Y, con esos 15 goleadores, el equipo zaragocista es, de la mano del Huesca, el segundo en el ranquin que refleja el número de futbolistas que han anotado tantos en la división de plata en cada escuadra, solo superado por el exagerado caso del Nástic de Tarragona, que cuenta con 19 después de su profunda transformación de plantilla obrada en el mes de enero.


El caso del Zaragoza destila una problemática cristalina en la morfología de su plantilla, roma y desacreditada de goles recientes desde el mismo mes de su terminación y pulimento, el último agosto. En 33 partidos de liga, el equipo zaragocista solo ha marcado 36 tantos. Es el 12º en la tabla de goles a favor. Se ha quedado a cero, sin marcar, en 11 de los 33, en un tercio de los disputados. Su mejor anotador en el actual plantel es Ángel, con 8 dianas. El único con una cifra medianamente aceptable.


Los siguientes, desde el segundo hasta el séptimo, solo aportan 2 goles a las alforjas generales. Es decir, el propio Dorca, con su doblete en media hora ante el Mallorca (el catalán es el primer goleador múltiple de la temporada en un partido), ha pasado a ser el segundo máximo goleador de la plantilla vigente del Real Zaragoza. Ahí, en ese paquete, comparte espacio con Pedro, Hinestroza, Lanzarote, Diamanka y Cabrera. Y, curiosamente, también aparece ahí el apartado "Goles en propia puerta de los rivales" que, asimismo, han sido dos (el de Razak, portero del Córdoba, en El Arcángel; y el de Pulido, central albacetense, en La Romareda). Cierran este raquítico elenco de producción goleadora, con un solitario tanto en su haber, Rico, Abraham, Isaac, Dongou, Guitián y el lesionado de larga duración Wilk.


Si se quiere cuadrar el balance convenientemente, es necesario adjuntar un casillero a las cuentas para los que estuvieron y, desde enero, ya no están en el Zaragoza. En el mercado invernal, el equipo zaragocista dio salida a los autores de ocho de sus goles. Ortuño se fue a Mallorca con 7 tantos. Jorge Díaz lo hizo al Numancia con uno.


Esta radiografía saca a la luz a los 15 goleadores del Real Zaragoza 2015-16. Si se une la rentabilidad del delantero titular de ahora, Ángel, con el que lo fue hasta Navidad mayormente, Ortuño, salen 15 goles entre ambos. Casi la mitad del total (contando con que hay dos de origen anómalo, marcados por los adversarios en sus propios marcos).


Los otros 19 goles restantes, se los reparten entre 13 jugadores. Menudeo. Puro y duro. Economía sumergida del gol. Cumplimiento estricto del expediente ofensivo a lo largo de una temporada por parte de muchos de los protagonistas. Otros, eso sí, ni siquiera han sido capaces de menudear. Jaime, por culpa de su prematura lesión, tiene bula. Los demás, no. Faltan goles con la firma de Culio, Ros, Morán, Vallejo, Campins, Marc Bertrán, Sergio Gil. Se fue sin mojar Aria Hasegawa. Los esporádicos Ortí, Tarsi y demás filiales, tampoco tuvieron duende en sus brevísimas aportaciones. Pero este último epígrafe es la anédocta de esta evaluación.


Lo serio y pernicioso es, no tanto que la plantilla carezca de un goleador sobresaliente (de esos que en otros equipos llevan ahora 16, 17 o 18 goles, como Borja Bastón en las filas zaragocistas del año pasado), sino que por detrás de los 8 de Ángel no vengan cuatro o cinco compañeros del canario con media docena cada uno. La moraleja sale sola. La delantera, escasa en efectivos, no tiene suficiente gol por sí sola. La segunda línea de ataque, es deficiente en producción anotadora y se queda muy por debajo de las exigencias. El centro del campo, es nulo casi por completo en las tareas goleadoras. Y la defensa, por su regular aportación, es curiosamente la que en mejores porcentajes se mueve según las medias estándar de goles llegados desde la retaguardia.


Cabrera (2), Rico, Abraham, Isaac y Guitián, los defensas, aportan 6 goles. Diamanka (2), Dorca (2) y el lesionado y casi inédito Wilk, rubrican los únicos 5 tantos que han venido desde la zona medular. Uno menos que los zagueros. Terrible comparativa. Pero no es la peor. Pedro (2), Hinestroza (2) y Lanzarote (2), la segunda línea del ataque actual, también suman 6. Los mismos que los defensores. Algo y alguien queda en evidencia con esta estructura del plantel. Por mucho que en las últimas nueve jornadas que restan esta fotografía fija pueda modificarse en algún parámetro clave, acumular ocho meses de competición con estos balances y estos desequilibrios solo puede derivar en lo que, con exactitud, le está ocurriendo al Real Zaragoza todo el curso: una inevitable irregularidad de resultados, una inestabilidad en el juego difícilmente combatible y una manera de actuar en la que el azar y la respuesta de los contrarios en el día de autos de cada partido tienen mucho que decir en los marcadores finales.


Este es el ranquin de goleadores en cada plantilla de Segunda División hasta hoy:


1- G. TARRAGONA      19

2- REAL ZARAGOZA  15

3- HUESCA                  15

4- MIRANDÉS              14

5- GIRONA                   14

6- ALBACETE              14

7- ALAVÉS                   13

8- LEGANÉS                13

9- NUMANCIA              13

10- MALLORCA            13

11- OSASUNA              12

12- LUGO                     12

13- VALLADOLID          11

14- TENERIFE              11

15- PONFERRADINA   11

16- ALMERÍA                10

17- LLAGOSTERA        10

18- BILBAO ATH.          10

19- OVIEDO                    9

20- CÓRDOBA                9

21- ALCORCÓN              8

22- ELCHE                      7

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