El Alavés sabe desde esta tarde que cuenta con tres bajas seguras de otros tantos titulares habituales en el equipo de Pepe Bordalás. A las seguras ausencias del lateral derecho Carpio, por lesión, y del medio centro Mora, por acumulación de amonestaciones, se ha sumado definitivamente el veterano central Sergio Pelegrín -ex del Zaragoza B-, que fue expulsado el pasado domingo en el partido que los vascos jugaron -y perdieron 2-0- en Leganés . El Comité de Competición no ha atendido el recurso presentado por el club vitoriano por la primera de las dos amarillas que el árbitró Arcediano Monescillo mostró a Pelegrín y el partido de castigo consiguiente ha recaído sobre el defensor albiazul. El Alavés, tras analizar la respuesta a sus alegaciones, ha decidido que no proseguirá recurriendo ante el Comité de Competición, por lo que asume definitivamente la ausencia de Pelegrín ante el Real Zaragoza.

En el terreno de las lesiones, además de la importante baja de Carpio, el técnico alavesista estará pendiente hasta el último momento de la posible recuperación del delantero centro y goleador del equipo, Gaizka Toquero. El ex del Athletic de Bilbao ya no pudo jugar el domingo en Leganés a causa de un serio esguince de tobillo (grado 2) que le ocasionó en la anterior jornada una entrada del central argentino del Almería, Saveljich. A estas alturas, todavía existen dudas de que Toquero pueda estar apto para jugar ante el Zaragoza, aunque el futbolista quiere hacer un esfuerzo por llegar en condiciones al fin de semana.

La lesión de Carpio, por su parte, sigue siendo motivo de comentarios en Vitoria por la peculiar forma en la que tuvo lugar. El lateral diestro que se produjo una luxación de hombro en el último entrenamiento de la semana pasada, en la previa al viaje a Leganés, al ejecutar una chilena durante un partido de futvoley, ejercicio lúdico que algunos equipos todavía llevan a cabo en los días de trabajo suave y poco exigente físicamente. Carpio tiene afectada la clavícula y su recuperación necesitará de varias semanas de inmovilización y readaptación progresiva.

En el ámbito relativo a la alineación,  la única noticia positiva que tiene ahora mismo el Alavés ante la visita del Real Zaragoza es la seguridad de la vuelta del central aragonés Víctor Laguardia, que estuvo ausente en Butarque por acumulación de tarjetas. El zaragozano volverá a repetir la experiencia de enfrentarse al equipo en el que se formó desde las categorías base y con el que debutó en Primera División, ya que el año pasado ya fue titular con el Alavés en los dos enfrentamientos ante los blanquillos.