Si el Real Zaragoza logra vencer al Lugo en La Romareda en el choque de la 27ª jornada, tiene a tiro alcanzar la séptima plaza de la clasificación, la más alta cota a la que aspira después de los resultados de los partidos adelantados al sábado.

El Osasuna se ha ido del punto de mira zaragocista al ganar 0-1 en Córdoba, en la última jugada del partido, y acumular así 43 puntos (iguala al propio equipo cordobés).

A los 38 puntos con los que arranca esta estación el Real Zaragoza, de vencer al Lugo se sumarían tres más y los de Carreras alcanzarían los 41. Los mismos que tiene el Alcorcón después de empatar en Soria (1-1 frente al Numancia en un campo nevado). Los madrileños son provisionalmente los inquilinos del séptimo puesto.

Dos partidos ajenos a lo que ocurra en La Romareda resultan claves de manera indirecta para que el deseado y posible repunte del Zaragoza hacia la antesala de la zona noble sea una realidad en la noche del domingo. El que requiere un resultado más improbable, a priori, es el que se juega en Miranda de Ebro. El Mirandés debería tropezar en su campo de Anduva frente al Tenerife y hacerlo con una derrota. Los burgaleses tiene 40 puntos. Con un empate -y 41 puntos por lo tanto-, entraría en juego el golaverage, que los zaragocistas tienen perdido en este caso.

El otro duelo donde el Zaragoza también tiene intereses directos es el Oviedo-Elche. No le interesa un triunfo ilicitano bajo ninguna premisa. Los alicantinos parten con 39 puntos y no deben llegar a los 42 para ser alcanzables y rebasables. Con miras a más largo plazo, también tiene sustancia el envite entre los dos primeros, Leganés-Alavés, en la matinal dominical madrileña: 48 puntos tiene de partida el club vitoriano, líder, y 46 los leganenses. Aquí, en este enfrentamiento, se va a marcar la distancia con el ascenso directo en estos momentos. Una referencia de lejanos planes, pero todavía asumible para los muchos perseguidores que aún aspiran a llegar a tiempo en junio, entre ellos el Zaragoza.

Por detrás, el Girona viene apretando en una larga remontada desde la 18ª posición, sótano -próximo al montacargas que baja a Segunda B- que llegó a ocupar a finales de diciembre. Su triunfo in extremis, por 0-1 en Palamós ante el Llagostera, en el derbi provincial gerundense, lo ubica ya con 37 puntos a rebufo del propio Real Zaragoza. Y, de lo que resta por jugarse, los ojos zaragocistas gravitarán especialmente sobre el Nástic de Tarragona-Valladolid. Los catalanes han arrancado la jornada en el quinto puesto, con 42 puntos. Los pucelanos, justo por detrás del Zaragoza, con 37. Son dos rivales directos que incumben bastante al futuro de los de Carreras.