Muñoz exige más defensa

Víctor, que pierde definitivamente a Mario, pretende insistir con su sistema clásico pero obliga a todo el entramado atacante a implicarse mucho más en las tareas de contención.

Víctor Muñoz, ayer al mediodía, tras el entrenamiento del equipo
Muñoz exige más defensa
O. Duch

Se acabó la manga ancha para los delanteros y jugadores de talante ofensivo que no retroceden con eficacia y regularidad para ayudar a la defensa. Víctor Muñoz, que ha meditado durante la semana modificar el sistema táctico base con el que viene jugando desde agosto (4-4-2), tiene previsto otorgar mañana en Gijón una última oportunidad de mejora en tareas de contención a sus hombres más adelantados antes de buscar otras alternativas que modifiquen las hechuras de su equipo ideal. "Vengo diciendo que, en el juego ofensivo, venimos jugando con cuatro atacantes. Cuatro. Los dos puntas y los dos hombres de banda. Y eso significa riesgo. Más riesgo que los demás rivales. Por eso, es necesario que ellos cuatro participen también en la manera de defender de todo el equipo. Y han de hacerlo bien", comienza describiendo Víctor Muñoz.


Durante siete semanas de buenos resultados y hasta el pasado lunes, cuando se consumó la derrota inesperada ante el Tenerife, estos déficit defensivos habían quedado difuminados por la notable cosecha de puntos. Esta semana, sin embargo, los cuatro hombres de talante ofensivo han quedado retratados negativamente por su escasa implicación en la parcela destructiva. "Contra el Tenerife, en un partido que fue atípico por muchas cosas, no supimos elegir bien, no leímos bien los momentos de atacar y defender", critica abiertamente Víctor.


"No solo Willian José ha de ayudar mucho más atrás a la hora de defender. También los dos extremos e, incluso, Borja Bastón. Todos deben implicarse más en esa tarea", destaca el entrenador sin rodeos.


Muñoz ha ensayado en los partidillos y en los simulacros durante la semana –algo que ya viene haciendo puntualmente desde hace un mes– una mutación táctica importante: prescindir del segundo punta (Willian José) e introducir un tercer centrocampista (Lolo, Tierno o Basha) que ayude a Dorca y libere hacia el área rival a Ruiz de Galarreta como enlace con Bastón. Pero, mañana en Gijón, el técnico aragonés todavía no va a apostar por ese drástico cambio en el inicio del partido ante el Sporting.


"Considero que cambiar el equipo radicalmente sería una locura. Llevamos un tiempo trabajando en una idea táctica y, por un mal resultado, no vamos a tomar una decisión radical. Pero sí es verdad que hay indicadores y circunstancias que nos dicen que hay hechos que solucionar. E iremos modificando las cosas poco a poco para tratar de mejorar. Y en eso estoy", explica Víctor Muñoz abiertamente.


El preparador de Las Delicias ve y admite las máculas en el juego defensivo de su actual equipo matriz. Pero, pese a tener ensayados otros diseños en la pizarra en busca de soluciones, todavía confía en que pueda reconducir los defectos de varias de sus piezas sin tener que acudir a un tratamiento táctico de choque. "Sí que he previsto jugar con un tercer centrocampista. Barajo introducir otros jugadores que cohesionen más el equipo. Que ayuden a armar más el medio campo. Podría ser. Pero no quiero ser radical. Creo que eso no tiene ahora sentido", admite Víctor Muñoz.


Así pues, parece cantado que, mañana en el Molinón, Willian José y Borja Bastón repetirán como dupla de arietes y que seguirá habiendo dos extremos profundos, uno Eldin Hadzic y, el otro, el que decida el técnico dentro de la terna Jaime, Álamo o Pedro (quien vuelve al grupo dos meses exactos después de su lesión de rodilla en Barcelona). Eso sí, todos ellos están advertidos públicamente de que con su aportación defensiva mostrada hasta hoy no es suficiente. Esas cuatro piezas del engranaje van a pasar un exhaustivo examen en Asturias antes de que, si no hay enmienda, el entrenador se vea obligado a aplicar un plan B en la disposición del equipo sobre el campo.La baja de Mario añade dificultad


Este partido de Gijón se afronta, como ya ocurriera frente al Tenerife hace cinco días, con la dificultad extra de la ausencia de Mario, el hombre más determinante en la defensa por su solvencia manifiesta día a día. Al veterano central canario lo va a suplir el juvenil Vallejo, que el pasado lunes en la derrota ante los insulares no estuvo al nivel de eficacia de sus primeros partidos con el primer equipo.


Víctor aprovecha esta relevante ausencia para solicitar aún más implicación del resto de los componentes del once que mañana juegue en Gijón. "La defensa no es solo cuestión de un jugador. Ni tampoco de la línea en sí misma. Es cosa de todo el equipo. Es necesaria una conciencia colectiva para defender bien. Es lo más importante de un equipo", enfatiza.