Ángel Martín González: "Estoy convencido de que el Real Zaragoza va a subir pronto"

Tres meses después de su llegada al club para armar la actual plantilla de la nada, el ejecutivo madrileño escruta la actualidad del equipo tras superar el duro inicio de curso y alcanzar la cabeza de la tabla

Martín González, ayer antes de ofrecer la entrevista a HERALDO.
Ángel Martín González: "Estoy convencido de que el Real Zaragoza va a subir pronto"
O. Duch

Diez jornadas, 19 puntos. Números que cimientan la ilusión porque el equipo está en coordenadas de ascenso a Primera.

Estamos en el buen camino. Creo que es así, es innegable. El equipo está haciendo las cosas bien, ha progresado mucho en muy poco tiempo. Pero cuidado. Aún no hemos pasado el primer cuarto de la competición. Esto es muy largo y no debemos lanzar las campanas al vuelo. 


Cierto, pero usted y el equipo han de entender que en Zaragoza hay ganas de disfrutar tras muchos años de penurias. Lo que ocurre es extraordinariamente bueno.

Lo sabemos. Precisamente, todo el trabajo que se está haciendo en el club desde finales de julio es en busca de que el zaragocismo vuelva a ser feliz en el plazo más corto posible. Pero hay que tener cautela. Debemos seguir con la misma seriedad, con la misma intensidad, y en marzo o abril, con las tres cuartas partes de la liga consumidas, ya veremos dónde nos encontramos. Ahora, es pronto y aún han de suceder muchas cosas.


Por encima de los puntos, que son muchos, lo mejor es que el equipo ha logrado una tendencia excelente pese a no estar todavía redondo en su solvencia. Lleva siete partidos sin perder.

Yo creo mucho en las dinámicas. Y, en este momento, este club está en una dinámica bonita. En todos los aspectos. Y considero que hay que ser inteligentes para aprovecharnos de esa inercia positiva. Ha llegado una ola buena y hay que subirse a ella para estar lo más arriba posible lo antes posible.


Hubo una semana crítica. Tras no ganar en los dos primeros partidos, el equipo fue goleado por el filial del Barça, eliminado por el Albacete en Copa y empató en casa con un Sabadell en inferioridad. Se llegó a la 5ª jornada en puesto de descenso a Segunda B.

Fuimos penalizados por un inicio de liga atropellado, porque todo se tuvo que hacer tarde, sin tiempo. Pagamos eso con errores en partidos de competición, cuando lo normal es que eso suceda durante los ocho o nueve partidos de pretemporada. Pero nosotros no la tuvimos. A partir del día del Alavés, comenzamos a ganar, a cometer menos fallos, a ir encontrando el once que más ha rendido... todo ha sumado para llegar a donde estamos hoy.


Hace exactamente tres meses del aterrizaje de la nueva propiedad y, por ello, también de su llegada al club. ¿Satisfecho de cómo le ha quedado el puzle que supuso hacer esta plantilla de la nada?

Estoy contento. He tenido la suerte de poder hacer este difícil trabajo en un club como el Real Zaragoza, hecho crucial que ha facilitado la labor. Este mismo equipo, en otra entidad con menos peso e historia, hubiese sido complicado de montar. Pero vuelvo a llamar a la calma. Hay mimbres, ganas, implicación. Lo hecho en las últimas semanas nos llena a todos de orgullo e ilusión, pero esto es muy largo. 


En el club, la gente habla muy bien de usted. Y viceversa. Usted se siente respaldado por sus dirigentes. Una comunión imprescindible para que el éxito cuaje.

Yo soy muy partidario de la labor de equipo. Y, desde el primer minuto, me siento apoyado, con libertad para actuar. Entre todos hemos logrado cosas que, por separado, no habrían sido posible.


Se le ve feliz en Zaragoza.

Está siendo una experiencia muy positiva. Se ha formado un grupo, en los despachos y el vestuario, con gente que permite pensar que es posible lograr ascender y aspirar a cosas buenas en un futuro cercano. Yo estoy convencido de que el Zaragoza va a subir pronto a Primera División.


De los futbolistas que están jugando hoy en el Real Zaragoza, ¿cuántos pensó en agosto que iba a ser imposible que viniesen?

Ninguno. No soy un kamikaze ni un suicida en lo mío. Si veo que algo es imposible, no pierdo el tiempo. Y en este verano pasado, no teníamos un segundo que perder. Algún jugador importante sí que se ha quedado por el camino. Reconozco que sí, que nos ilusionamos con algunos y al final no vinieron. Pero todos los que están, fueron buscados a propósito.


Fallaron los iraníes, Masoud y Ansarifard, que estaban atados. También el portero Toño, una gran decepción.

Sí, pero además también me refiero a chicos de algún filial (Lucas Vázquez, De Tomas, del Castilla) que queríamos que viniesen. Pero fue imposible. Al final, cambias el paso y, como es el caso, acabas encantado de la gente que ha venido. Es un gran grupo humano. Lástima que la LFP solo nos permita tener 18 fichas. Ese es el único problema serio que veo cuando empiecen las lesiones o las sanciones.


Que Bono no juegue, ¿es un problema respecto de su equipo, el Atlético de Madrid?

No. Bono es un jugador más. Si hubiese venido Toño, estoy seguro de que seguiría jugando Whalley, que está demostrando ser un gran portero. No hay problema.


Borja Bastón fue una apuesta de fe. Y está saliendo de maravilla.

Está de dulce. Todo lo que toca lo convierte en gol. Está a gusto, ha encontrado su sitio, su racha, y debe aprovechar su explosión. Desde el primer minuto quise que viniera. No lo hizo antes porque el Dépor, que tenía un año más de cesión del Atlético, dudó hasta el final. Las dudas nunca fueron nuestras. Él iba a ser nuestro ‘9’.


Willian José fue, al final de agosto, una sorpresa. Es un hallazgo.

El año pasado lo vi seis o siete veces con el Castilla. Aunque estaba algo pasado de peso y su equipo tenía problemas, dejó detalles de futbolista grande. Tuve claro que, si podíamos, lo íbamos a hacer. Le falta acertar más con el gol, pero nos está dando mucha calidad.


Eldin es otro descubrimiento. Y eso que no fue prioridad.

No es así. Tardó en venir porque el Hércules no lo puso fácil. El representante de Eldin es el mismo que el de Pedro. Y Pedro fue el primer fichaje. Ahí yo ya le pregunté por él. Hubo que pelear mucho su llegada, pero es evidente que la espera mereció la pena.


Jaime, una joya por recuperar, también apunta a acierto pleno.

Tiene unas condiciones impresionantes, sobre todo la velocidad, que lo hace diferente. Le pega a la pelota de maravilla y tiene gol. Ha de ser determinante si rinde bien. 


Dorca y Ruiz de Galarreta, los mediocentros, son una pareja ideal. 

Tienen mucha calidad los dos y se complementan muy bien. Me parece mentira que Dorca, con 31 años, aún no haya pisado la Primera División. Es una injusticia. Dorca ha tenido un comportamiento excepcional con el Real Zaragoza a la hora de venir. Tiene palabra. Y eso se valora mucho en el fútbol.


Atrás, optó por una pareja de centrales veteranos, Rubén y Mario. Están asomando como otro éxito.

Están dando, en general, un buen rendimiento. Mario está de escándalo, salta a la vista.


Es difícil, casi un sueño, que tanta gente nueva haya casado enseguida como colectivo.

Estamos hablando de individualidades en las últimas preguntas, pero es que no podemos dejar fuera de análisis a ninguno de los componentes de la plantilla. Todos, cada uno en su medida, están dando la talla cuando les toca. En todas las líneas. Hay gol, creación, contundencia atrás, alternativas desde el banquillo, implicación... de todo.


La última semana de fichajes, ¿tuvo la sensación de que iba a descarrilar con el asunto Chuli?

No. Con Lolo, por ejemplo, yo había hablado mucho antes. Chuli hubiera sido un buen refuerzo. Pero de la gente que no ha venido, ya no hay que hablar. Y Tato va a dar muchas cosas. Estoy seguro.


¿Qué tal con Víctor Muñoz?

Muy bien. En todas los sentidos. Está sacando mucho provecho al grupo. Yo creo que un entrenador es una parte decisiva en un equipo. Y el progreso del Zaragoza desde septiembre habla por sí solo.