Vía aragonesa, en manos de Agapito Iglesias

Esta vía sigue latente y este lunes se espera que la LFP respalde el depósito realizado como préstamo participativo.

El presidente de Telefónica durante una conferencia
Vía aragonesa, en manos de Agapito Iglesias
ARáNZAZU NAVARRO

A la espera del desarrollo de las otras dos vías que implican la inversión de un tercero se encuentra el proyecto de la Fundación Zaragoza 2032. Dicha propuesta está encabezada por César Alierta, presidente de Telefónica, y cuenta con el apoyo financiero de otros empresarios de prestigio en Aragón. Su presidente, y en caso de prosperar, presidente del Real Zaragoza sería Christian Lapetra, hijo de Carlos, el mítico extremo zurdo de la época de los Magníficos.


Esta vía sigue latente y este lunes se espera que la LFP respalde el depósito de 8 millones realizado en forma de préstamo participativo. Esa cantidad sirve como garante de viabilidad para el Real Zaragoza y está destinada a cubrir las necesidades de tesorería de la SAD.


Ese monto sirve ahora, al menos, como flotador de seguridad para el club, ya que llegado el 31 de julio aseguraría un plan de supervivencia alternativo. Pero para que esta opción prospere es necesario que Agapito Iglesias acceda a las exigencias planteadas por la Fundación Zaragoza 2032. Solicitan que Agapito Iglesias ejerza (como se detalla en las páginas anteriores) su derecho de resolución del contrato de compraventa, de tal manera que se produzca una retroacción de las acciones que vendió a los actuales propietarios.


Posteriormente, Agapito deberá aceptar una oferta por esos títulos de un euro y la no liquidación de comisió alguna. Posteriormente, la Fundación pasaría a ser la titular de las acciones del Real Zaragoza en mayoría, y se articularía en torno a una serie de patronos (los aportadores del capital), con la aprobación de un nuevo acuerdo con Hacienda y la renegociación de una nueva quita entre los acreedores de su convenio concursal como objetivos a conseguir una vez asegurada la vida del club.