Anton Shvets, el cuñado ruso del central checo

Anton, que no Antón, ha saltado al césped de La Romareda cuando el partido ya agonizaba. El Real Zaragoza perdía (0-1) contra el Deportivo y el jugador de la cantera entraba al campo sustituyendo a César Arzo. El centrocampista no ha tenido tiempo ni oportunidades de demostrar por qué, a sus 20 años, ha debutado con el primer equipo, pero la ausencia de Arzo -ha visto la quinta amarilla- le podría dar una nueva oportunidad el próximo domingo, frente al Alavés.

Anton Shvets, nacido en Ucrania, de nacionalidad rusa y madre georgiana, llegó a Zaragoza de la mano de su cuñado, Jiri Jarosik. El canterano es el cuñado del jugador checo, central del equipo aragonés durante un año y medio, y culpable de que el centrocampista acabara -y siga- en Zaragoza. Anton estuvo unos meses probando con el club a finales de 2010, tras los que volvió a Rusia para jugar en las categorías inferiores del Spartak de Moscú. En la campaña 2011-12 regresó al club aragonés, en esta ocasión para integrarse en las filas del División de Honor Juvenil, la pasada temporada ya jugó en el filial y ésta, ya asentado en el segundo equipo, ha debutado en Segunda. 

Anton ya había acudido este año a alguna convocatoria con Paco Herrera, pero ha tenido que esperar a la llegada de Víctor Muñoz para jugar sus primeros minutos con el primer equipo. También le han ayudado la lesión de Acevedo y la ausencia de Tarsi de la convocatoria, que le convertían, junto a Cidoncha, en el único recambio para el doble pivote. Con la sanción a Arzo, que se perderá el próximo partido por acumulación de tarjetas, es probable que el canterano entre en la convocatoria para el partido contra el Alavés, equipo en el que ahora juega su cuñado, Jarosik.

Familia de futbolistas

Anton Shvets no es el único futbolista de su familia. Su padre fue jugador, su cuñado todavía lo es y su hermano pequeño, de 15 años, juega en las categorías inferiores del Real Zaragoza. El año pasado, el centrocampista fue convocado por la selección sub 21 de Georgia, país de origen de su madre y en el que vivió durante varios años cuando era pequeño, pero renunció para poder jugar, en un futuro, con Rusia.

Su contrato con el club aragonés finaliza el próximo 30 de junio, aunque desde la entidad han mostrado interés por mantener a este jugador, al que ven como un jugador que puede seguir creciendo en el filial para, poco a poco, poder incorporarse al primer equipo. Anton es el quinto jugador de la cantera que debuta esta temporada, tras Rico, Tarsi, Diego Suárez y Esnáider, que jugaron sus primeros minutos con Paco Herrera.