La llegada de Víctor Muñoz ha supuesto una inyección de ánimo para la afición, de motivación para la plantilla y de zaragocismo para el Real Zaragoza. El técnico aragonés vuelve a casa en el momento en el que el club más le necesita. Lo hace obligado por el presente, por el pasado y, sobre todo, por el futuro de la que sigue siendo su casa. En su primer día, el entrenador no solo ha conocido a sus jugadores, con los que intentará mejorar la desastrosa campaña del Real Zaragoza, sino que ha analizado la situación del club, desde su relación con Agapito Iglesias hasta las opciones de ascenso, pasando por la plantilla y la afición.

Su decisión de volver a Zaragoza

"Es un reto y me he visto obligado. De ninguna manera pensaba en venir a entrenar al Real Zaragoza, pero me he visto obligado a aceptar la propuesta. Yo no tengo miedo a fracasar. Confío en los jugadores y vamos a trabajar al máximo".

"He venido siempre en situaciones muy difíciles. Nunca he tenido la suerte de venir a preparar al equipo en condiciones normales. También como jugador debuté en una situación difícil para el Real Zaragoza y en mi anterior etapa como entrenador el equipo también estaba en una situación compleja. Ahora es mucho más compleja, y por eso para mí es un reto profesional, pero sobre todo sentimental".

El ascenso a Primera

"En el fútbol todo es posible. Quién nos iba a decir a nosotros que íbamos a ganar la Copa del Rey. Era impensable. El Real Zaragoza tiene que estar en Primera División en muy corto plazo de tiempo. Es muy difícil, muy complejo, ahora mismo lo importante es pensar domingo a domingo y nada más. Ya veremos hasta donde podemos llegar. Tenemos que mejorar y dar confianza a los jugadores que tenemos, y eso solo se consigue mediante buenos resultados".

"Vamos a hacer todo lo posible para que el Real Zaragoza, al final de la temporada, pueda estar donde merece. Donde merece es en Primera División, esto es muy muy difícil, es un sueño. No podemos ir más abajo, tenemos que trabajar con intensidad, con profesionalidad, con mucho cariño. Vamos a hacer todo lo posible para que el Real Zaragoza mejore la situación en la que está".

"Ahora mismo lo único que nos preocupa es trabajar y salir de esta situación, que es compleja, para nosotros y para todos los aragoneses. A todos nos duele mucho. Quedan 12 jornadas y solo hay que pensar en el próximo partido. Está claro que al final el Real Zaragoza no puede estar donde está. Hay que mejorar".

La plantilla

"Es la mejor plantilla de Segunda División. No la puedo cambiar... Los jugadores son los que tenemos, son los mejores, y vamos a hacer todo lo posible para que el Real Zaragoza, al final de la temporada, pueda estar donde merece".

"Están en ese momento bajo en el que todo parece oscuro, pero creo que tienen calidad para mejorar la situación y la clasificación en la que están. Tengo que sacar lo que realmente tienen, darles herramientas para que puedan desarrollarse bien y ayudar al equipo".

La afición

"Pido colaboración. Lo más importante es que el aficionado venga a La Romareda, a ver y a apoyar a su equipo. Y en las circunstancias en las que nos encontramos, todavía más. Yo he dado ese paso hacia adelante, y espero que la afición también lo haga. Incluso en los momentos difíciles, que en 12 partidos los habrá, ya que para encontrar una situación favorable hay que pasar momentos desfavorables. Eso es lo que ha hecho durante mucho tiempo la afición del Real Zaragoza y lo que tiene que hacer ahora para salir de esta situación".

Agapito Iglesias

"Había dicho que no volvería nunca al Real Zaragoza mientras estuviera Agapito, pero el Real Zaragoza está por encima del señor Agapito, por encima de Víctor Muñoz y por encima de todos nosotros. La historia del Real Zaragoza es muy grande y queremos seguir haciendo historia".

"Del señor Agapito no voy a hablar en absoluto. Ni hoy, ni mañana, ni pasado, ni nunca. He venido a entrenar al Real Zaragoza, y el Real Zaragoza está por encima de todos nosotros. Hemos participado en su historia, pero sigue y seguirá. Eso es lo que queremos, que siga, y que lo haga en el lugar más alto que pueda estar. Respeto al señor Agapito y nada más".