El último ganador

Víctor Muñoz, el entrenador que logró los últimos títulos del Real Zaragoza, vuelve con el objetivo de recuperar el prestigio y la ilusión.



Vídeo de bienvenida del Real Zaragoza.



Diez años y un día después de lograr la última Copa del Rey del Real Zaragoza, la que el zaragocismo recordaba con nostalgia este mismo lunes, Víctor Muñoz regresaba a la capital aragonesa. Fue uno de los artífices de los dos últimos títulos del club, la mencionada Copa y la Supercopa de España, lograda tan solo unos meses después frente al Valencia. También estaba en el banquillo la noche del mágico 6-1 al Real Madrid, que acabaría valiendo el pase a la final de la Copa del Rey, que al final se perdió frente al Espanyol (1-4). Una triste derrota que empañó la magnifica actuación del Real Zaragoza en esta competición, en la que no solo había eliminado al Madrid, sino también al Barcelona -en cuartos- y al Atlético, en octavos de final.


Víctor Muñoz fue, además, el último entrenador del Real Zaragoza 'preagapitista', ya que Solans rescindió su contrato -tenía firmado un año más- pocos días antes de la venta del club a Agapito Iglesias. Su sucesor sería otro Víctor, Fernández. Se despidió del club el 15 de mayo de 2006, tras una temporada irregular en Liga que se arregló con una buena actuación en la Copa del Rey, pese a la derrota en la final. Había llegado en enero de 2004 para sustituir a Paco Flores y estuvo dos años y medio al frente del equipo.


Además de los dos últimos títulos del Real Zaragoza, entre sus méritos se puede destacar su apuesta por Zapater, que pasó directamente del juvenil a Primera División, y por Cani, que se consolidó en el primer equipo con Víctor Muñoz como técnico. Con su regreso, el aragonés vuelve a presentarse como un salvador, ya que es la tercera vez que acude al rescate del Real Zaragoza. Lo hizo, como jugador, en el tramo final de la temporada 1990-91, en la que contribuyó a una permanencia que se logró frente al Murcia en la promoción de descenso.


Diez años después


Volvió en su primera etapa como entrenador, hace ya más de diez años, cuando el equipo estaba en puestos de descenso. Víctor no solo salvó al equipo, sino que pasó a la historia del zaragocismo con su victoria en la final de la Copa del Rey ante el Real Madrid de los galácticos. Esta vez, la llamada de auxilio del Real Zaragoza ha sido incluso mayor que en las dos anteriores ocasiones, ya que no está en juego el descenso a Segunda, sino que la amenaza, en esta ocasión, es otro año en el 'infierno' o incluso la Segunda B.


"He venido siempre en situaciones muy difíciles. Nunca he tenido la suerte de venir a preparar al equipo en condiciones normales. También como jugador debuté en una situación difícil para el Real Zaragoza y en mi anterior etapa como entrenador el equipo también estaba en una situación compleja. Ahora es incluso peor, y por eso para mí es un reto, profesional, pero sobre todo sentimental", aseguraba Víctor Muñoz en su presentación: "La historia del Real Zaragoza es muy grande y queremos seguir haciendo historia". Ha vuelto el último campeón, esta vez, con el objetivo de limpiar los borrones que han manchado la leyenda que él mismo contribuyó a escribir.