El Real Zaragoza ha decidido presentar alegaciones por las tarjetas amarillas que vio Abraham en el transcurso del partido frente al Mallorca. El jugador acabó expulsado por dos acciones que resultan muy dudosas; en el segunda caso, incluso, resulta muy claro que el futbolista no tocó el balón con la mano.

El equipo aragonés confía en que prosperen las alegaciones. En el centro de la defensa es baja segura Álvaro, que vio la quinta amarilla que el equipo no va a alegar porque el futbolista sufre un fuerte golpe y, aunque se trata solo de una contusión, se ha preferido darle descanso ante la Ponferradina.

Hay que ver también la evolución de Laguardia. El central, que no estuvo convocado para Mallorca, entrenó el lunes con normalidad. Sobre el papel, y en función de las alternativas que maneje Paco Herrera, podría volver al equipo para ocupar la demarcación de central junto a Paredes.