Obligados a reaccionar

En la coyuntura en la que ha estado viviendo el Real Zaragoza durante las últimas temporadas, el uso del término final para designar un partido importante ha sufrido un comprensible desgaste. Desde luego, son ya demasiados los ultimatos vividos por el conjunto blanquillo a lo largo de estos años en el alambre. Excesivos partidos trascendentales, en los que una derrota supone más que la no ganancia de tres puntos. Lamentablemente, este domingo, a las 20.00, el cuadro zaragocista vuelve a encontrarse en dicha tesitura. Obligado a ganar en casa de un Betis que lucha por Europa, pues la amenaza del descenso es más real que nunca.

Desde luego, no cabe ninguna duda de que la derrota sufrida la pasada jornada ante el Athletic de Bilbao supuso un gigantesco paso atrás en los planes de permanencia de la escuadra zaragozana. Tanto que, por primera vez en lo que va de curso, el conjunto dirigido por Manolo Jiménez ve como, en caso de no ganar en el Benito Villamarín, incluso podría perder la categoría de manera matemática. Eso sí, para ello se debería dar también que Osasuna y Deportivo vencieran a Sevilla y Málaga respectivamente. Combinación de resultados que parece poco probable, aunque no imposible.

Sea como fuere, lo que resulta claro es que los zaragocistas no se pueden permitir ningún tropiezo más si quieren competir la próxima campaña en Primera División. Es cierto que, con la calculadora en la mano, vencer en los dos compromisos que restan no asegura evitar el descenso. Pero es idea extendida en el vestuario que sumando los seis puntos en juego el Real Zaragoza logrará superar a algún equipo en la tabla.

El camino, claro, no será fácil. Tras una magnífica campaña, el Betis mantiene vivas sus opciones de jugar en Europa la temporada que viene. Más en caso de mantenerse la sanción al Málaga para la próxima campaña. Actualmente, los verdiblancos son séptimos clasificados. Aunque, en una Liga extraña, todavía no tienen nada asegurado. Motivo por el cual, espoleados por su público, saldrán deseosos de vencer el partido.

Cierto es que el conjunto de Pepe Mel dista de encontrarse en su mejor momento. Así, en las cinco últimas jornadas, los andaluces solo han sido capaces de ganar un encuentro. Lo hicieron ante el colista Celta, y no sin apuros. Además, empataron con el Deportivo y perdieron contra el Mallorca. Balance negativo frente a los equipos de abajo. Dato que debe espolear al Real Zaragoza para ver que conquistar el Villamarín no es tan complicado como la clasificación sugiere.

Para el encuentro, Manolo Jiménez no podrá contar con Adam Pintér por sanción. La baja del húngaro, que se había asentado en el mediocentro durante los últimos partidos, es la única ausencia importante con la que tendrá que lidiar el técnico, que ha convocado a los 22 futbolistas disponibles para viajar a la capital hispalense. En su lugar, previsiblemente, formará José Mari o Movilla, quedando la opción de Romaric prácticamente descartada debido a su perfil menos defensivo.

En el rival, Pepe Mel no podrá contar con Mario, Chica ni Cañas, aquejados de molestias físicas. Dos bajas sensibles, especialmente la del centrocampista, pero que no merman el potencial ofensivo del cuadro sevillano. Representado, especialmente, en el rápido ataque liderado por Rubén Castro. El canario está, además, perfectamente secundado por jugadores de la talla de Pabón, Campbell, Jorge Molina o el ex zaragocista Juan Carlos. Futbolistas móviles, hábiles con el balón que, por si fuera poco, cuentan con variantes de lujo como Vadillo o Rubén Pérez.

Curiosamente, el Betis es el conjunto ante el que el Real Zaragoza comenzó su particular travesía por el desierto. Una funesta racha de partidos sin ganar que ha condenado a los aragoneses a una nueva situación límite. Ahora, en campo contrario, un estadio que históricamente se le ha dado mal a los blanquillos, acumulan 12 años sin ganar en él, deben remediarlo. Ya no existen oportunidades extra.

Real Betis: Adrián, Ángel, Amaya, Paulao, Nacho, Salva Sevilla, Beñat, Rubén Pérez, Pabón, Juan Carlos y Rubén Castro

Real Zaragoza: Roberto, Sapunaru, Loovens, Álvaro, Abraham, José Mari o Movilla, Apoño, Montañés, Víctor, Rodri y Postiga