La jornada se puso de cara

El empate cosechado el viernes por el Real Zaragoza en el Ciudad de Valencia adquiere un relieve singular tras las derrotas del Mallorca (2-1 en Bilbao) y el Deportivo (1-0 en Valladolid). La formación de Manolo Jiménez hace así muy bueno el punto conseguido ante el Levante.

A pesar de que la ilusión del zaragocismo era lograr una victoria que encarrilara de forma definitiva la permanencia, las derrotas de los rivales permiten mirar con cierto optimismo el desenlace de la competición.

Solo el triunfo conseguido por Osasuna ante el Getafe (1-0) se convierte en un resultado adverso, a la espera de los duelos que han de afrontar el Celta en el Villamaría con el Betis (este domingo) y el Granada, el lunes, frente a la Real Sociedad en Anoeta.

Los de Manolo Jiménez disfrutan este domingo de su segundo día de descanso. A partir de este lunes comenzarán a preparar el partido que el domingo les cita, en el estadio de La Romareda, ante el Athletic de Bilbao (19.00). La victoria ante el Mallorca selló la salvación definitiva de los vascos.