Real Zaragoza

El día de San Jorge más lúgubre para el Zaragoza

El Real Zaragoza, que entrenó a su llegada de Vigo, pasó el día de Aragón en su peor situación de los últimos años.

El Real Zaragoza, este lunes en Balaídos.
Celta - Real Zaragoza_2
EFE

Vuelta de Vigo y a entrenar. Para el Real Zaragoza, este 23 de abril no fue un día de asueto como en el resto de la Comunidad. La institución blanquilla, uno de los mayores símbolos deportivos de Aragón, vivió otro San Jorge en crisis. Seguramente, el peor de los últimos años. Colistas y sin haber logrado un triunfo en 15 partidos, el conjunto zaragocista se encuentra atorado en un fango del que no puede escapar.


Coloquialmente, se suele decir que la esperanza es lo último que se pierde. Sin embargo, a tenor de lo demostrado sobre el verde de Balaídos, el cuadro dirigido por Manolo Jiménez carece totalmente de ella. Los aragoneses no poseen argumentos que dejen paso al optimismo. Por lo que, a pesar de lo que digan las matemáticas, el de este año se ha presentado como el día de Aragón más lúgubre de los últimos años.


No en vano, los fríos números muestran que, a falta de cinco jornadas para que finalice el campeonato, la salvación está únicamente a dos puntos de distancia. En condiciones normales, un espacio fácilmente salvable para cualquier equipo. Lamentablemente, para la actual escuadra zaragozana el hueco se antoja todo un mundo.


Hasta ahora, la lograda la pasada campaña de los aragoneses supone la salvación más increíble en la historia de Primera División. Por ello, mirando fechas, se observa que el Real Zaragoza pasó el San Jorge 2012 en peor situación en la tabla. Concretamente, a seis puntos de la permanencia. Esa jornada, la 35ª, el cuadro blanquillo había perdido contra el Mallorca por 1-0. El paso previo a un 'rush' final de cuatro triunfos consecutivos que finalizó con la fiesta de Getafe. Aunque, sin duda, la mayor diferencia con aquella campaña radica en el terreno de las sensaciones. Entonces, los aragoneses ya habían demostrado su capacidad de ganar a cualquiera tras derrotar a conjuntos de la talla de Valencia y Atlético de Madrid. Una competitividad que actualmente está bajo mínimos, más tras los dos tropiezos en tierras gallegas.


En la 2010/11, el león rampante también llegó al 23 de abril en puestos de descenso. Eso sí, empatado con el Málaga, decimoséptimo, con 33 puntos. Entonces, todavía quedaban seis partidos por jugarse, los cuales fueron apurados al máximo por el cuadro dirigido por Javier Aguirre. Finalmente, el Ciudad de Valencia fue testigo del considerado primer milagro zaragocista. Una reacción contra el destino que forjó un espíritu irreductible que ahora se ve amenazado.


Sin duda, el San Jorge más tranquilo fue el de 2010. Tras el cambio de técnico por el que Gay relevó a Marcelino al frente del banquillo, los zaragocistas consiguieron certificar su salvación una jornada antes de que terminara la Liga. De hecho, a cinco jornadas para finalizar, los aragoneses ya se encontraban fuera de peligro, concretamente decimosextos y dos puntos por encima del fuego. Con perspectiva, y aunque en su momento no se viviera así, la temporada más tranquila del amargo purgatorio por el que vaga el club zaragozano durante los seis últimos años.