Real Zaragoza

A corazón abierto

El equipo aragonés dejó atrás el régimen de puertas cerradas que llevaba imperando durante los dos últimos meses y se ejercitó en la Ciudad Deportiva con presencia de público y prensa.

Entrenamiento del Real Zaragoza
A corazón abierto
O.DUCH

Cambio de rutina. El Real Zaragoza se ejercitó este miércoles en la Ciudad Deportiva con presencia de público y aficionados. Una diferencia respecto al régimen de puertas cerradas y máximo secretismo que, desde mediados de febrero, se había impuesto en el club zaragocista. Con el equipo colista y tras 15 partidos consecutivos sin ganar, el cuadro aragonés busca modificar su día a día. Un cambio que espera pueda ayudar de cara al trascendental partido que este sábado poseen ante el Mallorca. Probablemente, la última final.


Con puntualidad británica, el equipo comenzó la práctica a las 11.00. Manolo Jiménez, acompañado de su cuerpo técnico en bloque, se dirigió al vestuario donde se cambian los futbolistas y, todos juntos, comenzaron los primeros ejercicios. Antes, algunos jugadores como Movilla habían trabajado individualmente en el gimnasio. A pesar de que el grupo ya había entrenado el martes, a su llegada de Vigo, la sesión respondió al patrón propio del día después de partido. Esto es, los titulares por un lado y el resto por otro.


Así, el grupo con los diez jugadores de campo que saltaron de inicio a Balaídos se dedicó exclusivamente a aspectos físicos y de recuperación. Carreras, estiramientos y poco balón. El resto, por su parte, combinaron ambas facetas. Primero postas y después ejercicios en campo reducido para terminar con un partidillo de siete contra siete.


A pesar de los malos resultados, desde fuera el ánimo del grupo no se observó resentido. Tampoco Manolo Jiménez evidenció una manera de trabajar diferente a la habitual. Como es habitual en él, el técnico estuvo muy activo durante toda la sesión, corrigiendo a sus pupilos cuando a su juicio no lo hacían bien y ofreciendo sus clásicos ánimos en voz alta.


En el entrenamiento participó la totalidad de la primera plantilla del Real Zaragoza. Además, Pablo Alcolea, que ejerció de improvisado jugador de campo durante el último ejercicio con sorprendente buen resultado, y Jorge Ortí, que trabajó como uno más, completaron el grupo.