Final de Copa Osasuna - Real Madrid: la ilusión de David y la obligación de Goliat

Los navarros aspiran a dar la sorpresa en su segunda final de Copa ante un Real Madrid que necesita redimirse en el torneo y rearmarse de cara a la doble batalla con el Manchester City.

La final de Copa se juega en el sevillano Estadio de La Cartuja
La final de Copa se juega en el sevillano Estadio de La Cartuja
Afp

Real Madrid y Osasuna pelearán por la gloria este sábado en el sevillano Estadio de La Cartuja con ánimos y exigencias dispares. Los blancos, deprimidos por su pobre desempeño en las últimas jornadas de Liga, necesitan redimirse en un torneo que no conquistan desde 2014 y rearmarse tres días antes de inaugurar su doble refriega a vida o muerte con el Manchester City en la Champions. Los rojillos, impulsados a la segunda final de la Copa del Rey de su historia 18 años después de sucumbir a manos del Betis en el hoy desaparecido Vicente Calderón, sueñan con dar la campanada para extraer la matrícula de honor a una temporada en la que el conjunto de Jagoba Arrasate se ha confirmado como valor en auge dentro de un fútbol necesitado de propuestas tan vivificantes como la que supervisa el técnico de Berriatúa a partir de una apuesta sin fisuras por el vivero de talento que tiene en Tajonar. Es la ilusión de David contra la obligación de Goliat.

Diecinueve veces campeón del torneo del K.O. y subcampeón en otras 20 ocasiones, el Real Madrid no había vuelto a pisar el último escalón del certamen desde que superase al Barça del Tata Martino nueve años atrás con aquella cabalgada en la que Gareth Bale posterizó a Marc Bartra. A partir de dicha noche de abril en Mestalla, los blancos han caído por partida doble en dieciseisavos de final (Cádiz y Alcoyano), una en octavos (Atlético), cuatro en cuartos (Celta, Leganés, Real Sociedad y Athletic) y otra más en semifinales (Barça). Un signo inconfundible de la poca importancia que tradicionalmente conceden en Chamartín a una competición que, sin embargo, puede servirle ahora como catapulta al ejército que abandera Carlo Ancelotti.

Además de poner fin a un largo periodo de sequía, ganar la Copa del Rey supondría un considerable impulso para una escuadra acostumbrada a galvanizar su aparato locomotor a base de títulos, con la Champions como principal sustento. Las apariciones más recientes del Real Madrid han revelado inopinados achaques de los blancos, pero La Cartuja puede vigorizarlos de un plumazo. Ese es el propósito de Ancelotti, que no tendrá reparos con el once, pese a la inmediatez del asalto contra el City del cyborg Haaland en el Santiago Bernabéu.

El italiano convocó al pelotón al completo y tiene toda su artillería disponible salvo Mendy. Recupera a Alaba, restablecido de la lesión en los isquios que le mantenía de baja desde el desplazamiento a Stamford Bridge. También a Benzema, al que protegió de la visita a la Real Sociedad para que afronte en perfectas condiciones los colosos alpinos de mayo, y a Vinicius, oxigenado igualmente entre semana, aunque en su caso por imperativo arbitral.

La principal incógnita es si Modric, recuperado en tiempo récord de su problema muscular en la pierna izquierda, saldrá de inicio o aguardará turno desde el banquillo. Si Carletto considera que el riesgo es mínimo, otorgará el bastón de mando al balcánico y dispondrá el bloque con el que devastó al Barça en el Camp Nou para abrir de par en par las puertas de la final de Copa, el mismo que sojuzgó también al Chelsea en cuartos de la Champions. Los números -tres victorias en tres partidos, ocho goles a favor y ninguno en contra- acreditan el poderío de ese once ultraofensivo al que tendría que hacer frente un Osasuna que encara el partido más trascendente en los casi 103 años de historia del club navarro.

¿Del pozo a la cima?

Tras dejar en la cuneta a Fuentes, Arnedo, Nàstic de Tarragona, Betis, Sevilla y Athletic, la tropa de Jagoba Arrasate acude sin remilgos a la justa con un patricio oponente al que Osasuna nunca ha sido capaz de zaherir en los ocho enfrentamientos previos que han mantenido en la Copa del Rey, pero al que logró contener esta misma temporada a domicilio en Liga, frenando en seco la racha de seis victorias consecutivas con la que el Real Madrid comenzó el campeonato de la regularidad.

Arrasate aprovechó la desahogada situación liguera de su escuadra para reservar el martes contra el Barça a algunos de sus futbolistas más castigados por la acumulación de minutos y, pese a verse en inferioridad numérica durante más de una hora, su equipo rozó la machada en el Camp Nou.

La actuación en el feudo azulgrana refrendó la capacidad de brega de un plantel que tiene la oportunidad de llevar el primer título a las vitrinas de El Sadar, menos de cuatro años después de certificar su regreso a la élite del fútbol español y cuando no ha transcurrido ni una década de los goles de David García y Javi Flaño en la Nova Creu Alta que evitaron un descenso a Segunda B revestido de tintes apocalípticos para los rojillos. El central criado en Tajonar, que se había estrenado aquella campaña con el primer equipo, es hoy internacional absoluto con España. Otra muestra más de cómo han cambiado los tiempos para Osasuna, que está dispuesto a saltar la banca en La Cartuja.

-Alineaciones probables:

Real Madrid: Courtois, Carvajal, Militao, Alaba, Camavinga, Kroos, Valverde, Modric, Rodrygo, Benzema y Vinicius.

Osasuna: Sergio Herrera, Moncayola, Unai García, David García, Manu Sánchez, Moi Gómez, Torró, Rubén García, Oroz, Abde y Chimy Ávila.

Árbitro: Sánchez Martínez (Comité Murciano).

Hora 22:00 h.

Estadio: La Cartuja.

TV: La 1 / Vamos.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión