fútbol
Un árbitro de 16 años denuncia una agresión en un partido juvenil en Zaragoza
El colegiado declaró ante la Policía que el padre de uno de los jugadores del Alfajarín le pegó en la espalda al final del encuentro contra el San Fernando el pasado sábado.

"Ha habido agresiones a árbitros, y por supuesto todas son censurables; pero nunca en mis cuatro años como presidente del Comité Aragonés de Árbitros habían agredido a un árbitro menor de edad. Es un hecho lamentable desde todos los puntos de vista", confesó este martes Paco Ramó, máximo dirigente arbitral en Aragón. La afirmación se refiere a la agresión que sufrió el joven colegiado D. N. M., de 16 años de edad, el pasado sábado a la conclusión del encuentro del Grupo II de la categoría de Segunda Juvenil que disputaron el San Fernando y el Alfajarín en el campo 2 (anejo al estadio Pedro Sancho) de las instalaciones federativas de Puente Santiago en Zaragoza. Dicho partido concluyó con el marcador de 3-1, siendo expulsado un jugador visitante en el minuto 83, y otros dos jugadores visitantes una vez el partido ya había finalizado.
La denuncia presentada por el árbitro es explícita, no necesita de glosas para definir la tensión con que se viven algunos partidos de fútbol base. "Durante todo el partido el árbitro recibió insultos desde la grada -arranca la narración del joven colegiado en las dependencias policiales-. Al finalizar el encuentro, cuando el árbitro abandonaba el terreno de juego camino de los vestuarios, los padres de los jugadores del Alfajarín invadieron el terreno de juego acercándose al colegiado de manera agresiva y de nuevo propinando insultos", reza la declaración tomada por la Policía Nacional en la dependencia de Actur-Rey Fernando.
Cuando el ambiente parecía calmado, se produjo la agresión. "Uno de estos individuos se acercó al árbitro y le increpó, y acto seguido le pegó en la espalda con la palma de la mano de forma contundente", continúa la declaración del colegiado. Fue la madre del árbitro, que se encontraba presenciando el choque, la que llamó a la Policía. Según esta versión, el agresor abandonó el campo una vez avisadas las fuerzas del orden. Personados los agentes, se realizó una batida por la zona en busca del agresor, no siendo localizado.
Después de denunciar en la Policía, D. N. M. fue sometido a un examen médico en el hospital Royo Villanova para valorar las lesiones. "El paciente acude a Urgencias -consta en el informe- por presentar dolor a nivel escapular izquierdo de un día de evolución tras haber sido golpeado por un adulto durante un partido de fútbol. Refiere que el dolor le aumenta con los cambios posturales y con la inspiración profunda".
En el Comité de Árbitros se muestran muy sensibilizados con el suceso. "Hay que proteger a los árbitros. Cualquier manifestación de violencia es censurable. Por supuesto, los servicios jurídicos del comité ya se han puesto a disposición del árbitro. Me parece lamentable lo ocurrido, más siendo un menor el agredido", concluyó Paco Ramo.