Tito García Sanjuán, el trotamundos que despertó un maremoto

El técnico aragonés del Formentera apadrinó la hombrada copera ante el Athletic de Bilbao

Hubo que instalar gradas supletorias para ver al Athletic en Formentera.
Hubo que instalar gradas supletorias para ver al Athletic en Formentera.
Sergio G. Cañizares/Efe

La Ponferradina tumbó al Villarreal (1-0), el Atlético de Madrid hizo la risa en Elche (1-1), el Formentera le dio un susto de muerte al Athletic de Bilbao… La épica, íntimamente unida al relato copero, nos dejó episodios repletos de emoción en su serie de diecisesavos de final. La hombrada ante el Athletic la apadrinó Tito García Sanjuán, joven entrenador aragonés que gestiona el humilde equipo de Formentera. “Nos faltó un pelo para ganar, muy poco. Marcamos primero, en el minuto 60, y ellos nos empataron de inmediato en un remate de Raúl García”, reconoció el técnico zaragozano, que el próximo 29 de noviembre visitará Bilbao en el careo de vuelta. “En San Mamés será muchísimo más difícil, aunque será el partido de nuestras vidas, un partido que todos deseamos que llegue. Es un campo enorme. Ellos tienen todo a favor allí. Pero nosotros no tenemos nada que perder, aunque el año pasado el Sevilla ya nos metió nueve en el Sánchez Pizjuán...”, bromeó. Y es que el Formentera se ha acostumbrado a las gestas. El pasado curso ya avanzó en el camino copero hasta encontrarse con el Sevilla de Champions, con Sampaoli en el otro banquillo e Iborra, Sarabia, Correa y Vietto en el césped. “Ante el Sevilla fue una experiencia increíble que ahora estamos reviviendo. El Athlétic solo nos jugó con un chico del filial en Formentera, con Gil. Estoy muy orgulloso de lo que estamos haciendo”, subrayó Tito.

La visita del Athletic revolucionó el pequeño trocito de tierra de las Pitiusas que es Formentera, la isla menos poblada de las Baleares, a solo tres kilómetros de Ibiza. “Son solo tres kilómetros, pero para llegar a Ibiza hay que coger el barco, que es el único medio de transporte para salir de aquí”, precisó Tito. “En invierno, apenas hay 4.000 personas en la isla. Es muy pequeñita. Desde la Punta de la Savina, donde está el puerto, hasta el Faro de la Mola apenas hay 27 kilómetros. Es un sitio maravilloso para ir de vacaciones, pero nosotros estamos todo el año para jugar al fútbol. Desde luego, no es sencillo atraer a futbolistas hasta aquí. Estamos en Segunda B. Los jugadores no son millonarios, sino mileuristas. Jugar ante un grande del fútbol español, como es el Athletic, está suponiendo todo un acontecimiento. Nosotros somos humildes, jugamos en un campo de pequeño de césped artificial. Suelen ir en los partidos de Liga menos de mil espectadores. Para jugar con el Athletic hubo que instalar gradas supletorias. Además, había 90 periodistas acreditados, con transmisión en directo por televisión de la cadena Bein Sport. Está siendo una experiencia muy enriquecedora”, explicó.

La travesía copera del Formentera partió este año de la eliminatoria ante un conjunto aragonés, el Tarazona de Tercera División. En ese cruce, Tito se encontró en el otro banquillo con David Navarro, todo un referente en Aragón y exentrenador de Tito en el Foticos Zaragoza de fútbol sala. Los baleares pasaron en la prórroga. También tuvieron que llegar al tiempo adicional para superar en la segunda ronda al Logroñés. “Fue emocionantísimo. En el minuto 72 perdíamos 0-2. Hicimos el 1-2 en el minuto 82 y en la misma jugada se lesionó nuestro delantero. Empatamos y con un jugador menos les ganamos en la prórroga por 4-3. Ahora iremos a San Mamés con 1-1 a la ida. Sabemos que será complicado, pero lo vamos a intentar”, advirtió.

Formentera representa una escala más en la aventura permanente de Tito García Sanjuán. el trotamundos que despertó un maremoto ante el histórico Athletic de Bilbao. “He entrenado en las categorías inferiores del Villarreal, donde dirigí a Borja Iglesias, ahora en el Zaragoza. Después tuve que irme a Vantaa, a 20 kilómetros de Helsinki, en Finlandia (sí, sí, Finlandia…) para intentar seguir haciéndome un hueco en este deporte. Ahora ya llevo dos años en Formentera. San Mamés es un sueño para todos nosotros”, detalló. Todo por esa pasión esférica llamada fútbol. “Estoy enamorado del fútbol, pero también he hipotecado muchas cosas por el fútbol. Mis hijos viven en Benicarló (donde Tito es héroe local tras su recordado paso por el Benicarló de fútbol sala). Es duro no ver todos los días a Nerea, que ya tiene 11 años; o a Hugo, que tiene ocho; o a Clara, de tres añitos”, reflexionó el técnico. “El fútbol es un deseo, un sueño permanente. El que vivimos el miércoles con el Athletic, el que espero vivir en San Mamés”, concluyó Tito García Sanjuán.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión