Sergio Moreu, el presidente del CD Robres, fue ayer el segundo citado, en calidad de testigo, por parte del Grupo de Blanqueo de Capitales de la Policía Nacional de Zaragoza, dentro de la investigación que se puso en marcha al inicio de la semana tras la denuncia de Humberto Arto, el entrenador del Atlético Escalerillas, por posibles amaños de partidos relacionados con las apuestas. Moreu ya se había puesto en horas previas a disposición de cualquier instancia que pueda esclarecer el grado de realidad y profundidad de este caso y, ayer, le tocó el turno de aportar datos.

El dirigente robresino redundó sobre la apreciación de que en el seno del CD Robres no existe ninguna sospecha ni ninguna prueba de comportamientos extraños entre los jugadores de su plantilla. Al respecto, tras constatar el daño irreparable que la puesta en marcha de esta investigación ya ha ocasionado al Robres, sea cual sea la desembocadura final del asunto, Moreu se prestó a colaborar en cualquier aspecto en el que se le requiera de cara a salvaguardar la integridad de su club y de la afición y el pueblo que lo sustenta.

Por su parte, la Federación Aragonesa de Fútbol, en una de las decisiones de la Comisión de integridad y prevención de prácticas irregulares –reunida en la noche del miércoles– ha solicitado a la Policía una copia de la denuncia que ha dado origen a este litigio