Una denuncia ante la Policía descubre el primer caso de amaño de partidos en Aragón

Las apuestas son el origen de esta maniobras, que tendrían varios partidos del CD Robres bajo sospecha.

Imagen del partido Cuarte-Robres, de la Tercera División aragonesa, jugado en la recta final de la liga.
Imagen del partido Cuarte-Robres, de la Tercera División aragonesa, jugado en la recta final de la liga.
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Una denuncia ante el Grupo de Blanqueo de Capitales de la Policía Nacional de Zaragoza ha sido el detonante del descubrimiento del primer caso de amaño de partidos en Aragón en categorías de carácter regional. Una iniciativa, de un entrenador de uno de los clubes de la Tercera División aragonesa, que ha puesto en marcha con velocidad de crucero la maquinaria de la investigación. Algo que, varias semanas antes, ya se manejaba en el entorno del fútbol regional con sospechas fundadas respecto de determinados partidos en los que fue protagonista, en la recta final de la liga, principalmente un equipo: el CD Robres.

Las apuestas son el origen y el motor de la conducta fraudulenta, en principio de varios futbolistas, que ya está investigándose desde las mencionadas instancias policiales. Porque, desde hace un tiempo, las casas de juego legales de todo España (también en Aragón, por supuesto) incluyen con asiduidad cada fin de semana de competición diferentes partidos de este tipo, de categorías no profesionales, pertenecientes al fútbol aficionado o ‘amateur’, en un espectro alejado de la repercusión mediática de las apuestas que giran en torno al fútbol o el deporte profesional.

La raíz del caso que está bajo la lupa en la Policía y que puede suponer el primer gran escándalo del fútbol regional aragonés proviene de conductas anómalas, resultados extraños, de secuencias de goles llamativas. También de líos de vestuario que trascendieron en el mundillo de la Tercera División como la pólvora y de asunciones orales de culpabilidad ocurridas en el periodo temporal en el que, al menos el CD Robres, ha disputado varios de sus últimos partidos de liga. Un club, el monegrino, que concluyó la competición en 8º posición, a nueve puntos de los puestos de promoción de ascenso a Segunda B, pugna en la que estuvo vivo precisamente hasta que comenzó a surgir la serie de extraños marcadores adversos que lo hicieron perder comba del grupo cabecero en un momento determinado, ya a finales de abril.

Cronológicamente, el partido Cariñena-Robres (3-1) es el primer duelo en el que se conocen los primeros indicios de este posible caso de fraude en la competición fundamentado en las apuestas. También el Cuarte-Robres (6-2), disputado dos semanas más tarde, elevó el grado de atención a lo que ya estaba advirtiéndose desde varios puntos de observación del caso. A partir de ahí, la espiral ha ido girando en diferentes sentidos, ampliando el horizonte del problema, con un abanico más grande de elementos a analizar.

Para ello, ya han comenzado las comparecencias en las dependencias policiales para tomar declaración a testigos de primer rango en los hechos. En esa condición acudió este martes a comisaría el entrenador del CD Robres de la temporada recién concluida, Diego Allueva. El joven preparador zaragozano, que ya anunció hace un tiempo que no continuaría el año próximo en el equipo, ha pasado de celebrar el éxito de una gran temporada con el club más modesto de la categoría (el censo de Robres no llega a los 570 habitantes y la segunda población más pequeña de España en contar con un equipo en Tercera, tras la riojana de Anguiano) a sufrir este problema de primer orden con varios de sus jugadores bajo sospecha de delito. El técnico dijo no estar al tanto de la conducta de los futbolistas que pueden estar sumidos en la maniobra delictiva que se investiga.

En lo sucesivo, habrá bastantes más declaraciones de este tenor. Directivos y, sobre todo, futbolistas, han de ayudar a esclarecer un asunto que se antoja espinoso. También lo harán jugadores de otros clubes, relacionados directa o indirectamente con los partidos bajo sospecha. Paralelamente, la Federación Aragonesa de Fútbol está en marcha.

El caso no ha hecho sino comenzar y su desembocadura es, respecto del grado de su dimensión y repercusiones, aún incierta. No está claro de cuántos implicados se puede estar hablando. Ni tampoco se puede cuantificar el volumen de dinero que se pudo mover. Lo único claro a esta hora es que el fútbol regional aragonés vive su primer caso de amaño de partidos en Tercera División con las apuestas como origen del presunto delito.

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