El Real Madrid ha regresado este domingo a los entrenamientos tras el parón navideño con una sesión realizada a puerta abierta para los socios del club blanco, por lo que ha contado con un total de 7.000 aficionados que llenaron las gradas del estadio Alfredo Di Stéfano.

Tras las pequeñas vacaciones de las que ha podido disfrutar la plantilla del Real Madrid, este domingo tocaba la vuelta a la rutina para preparar el próximo compromiso del conjunto blanco ante la Real Sociedad. Dado que las gradas estaban completamente llenas, el buen ambiente se hizo patente durante todo el entrenamiento.

La plantilla de Jose Mourinho estuvo observada desde el palco presidencial por el máximo dirigente del club blanco. Florentino Pérez decidió acudir al entrenamiento para apoyar a sus jugadores, muy cuestionados tras la última derrota en Málaga.